Las Reliquias de San Martin de Porres tocan suelo Arequipeño
La Ciudad de Arequipa, da la bienvenida al Insigne pero Humilde Visitante.
Alguien a quien no le importó ser discriminado y menospreciado, es más, hizo de esto su manera de amar a Dios y a los demás.
Martin de la Caridad, fray Martin o simplemente Hno Martín como muchos le llamaban.
Ahora viene a tierras arequipeñas para visitar como en otros tiempos a sus queridos hermanos Dominicos y Dominicas, a su hermana Sor Ana de los Angeles Monteagudo y a tantos que aquí lo quieren y aman por ser el amigo que sana sus heridas y consuela en sus problemas.
Alguien a quien no le importó ser discriminado y menospreciado, es más, hizo de esto su manera de amar a Dios y a los demás.
Martin de la Caridad, fray Martin o simplemente Hno Martín como muchos le llamaban.
Ahora viene a tierras arequipeñas para visitar como en otros tiempos a sus queridos hermanos Dominicos y Dominicas, a su hermana Sor Ana de los Angeles Monteagudo y a tantos que aquí lo quieren y aman por ser el amigo que sana sus heridas y consuela en sus problemas.
Visita de las reliquias de San Martin de Porres OP a la ciudad de Arequipa
MARTÍN PREDICADOR ITINERANTE,
Peregrinación con las Reliquias de Fr. Martín - El Arca – Relicario
Una verdadera joya artística es el Arca que los artesanos cusqueños han confeccionado para llevar la reliquia de San Martín de Porres, en este 50 Aniversario de la Canonización de San Martín. Es una pieza tallada en madera de cedro, que contiene una alegoría al Convento y la Ciudad de Lima.
En la parte frontal ha quedado representado el Capítulo del Convento del Santísimo Rosario con la imagen del Cristo Crucificado ante el cual tantas veces vieron arrobado y levitando a fr. Martín de Porres Velásquez.
En la parte posterior del arca, con la misma alegoría del Capítulo la imagen de Martín en su glorificación. Ambas imágenes han sido hechas en relieves de plata y tallas de madera. Los laterales del arca representan el primer claustro del Convento con sus galerías de primera y segunda planta. Los arcos de la segunda planta son calados para poder contemplar la reliquia ya que cuenta con iluminación interior.
En la primera planta, los arcos se encuentran ocupados por arcángeles cusqueños, que llaman la atención en esta obra, tributo a la Santidad Limeña, pero que representan la mano y el ingenio de los hijos del Imperio Inca que quieren estar siempre presentes al lado de Martín. La reliquia es un resto de primer grado, ex ossibus de San Martín, el omóplato del santo, que custodian los frailes dominicos en el Santuario de Santa Rosa.
Reliquia de primer grado, ex ossibus de San Martín, el omóplato del santo
¡Ven, Vive con nosotros y con ella esta fiesta!
Fuente:
¡Ven, Vive con nosotros y con ella esta fiesta!
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La peregrinación del santo mulato a la Ciudad BlancaSanto de la escoba. Fieles católicos esperan llegada de San Martín de Porres, el primer santo negro de América. En vida destacó por su humildad.
Reliquias llegaron el sabado 4 de agosto. Restos del omóplato de San Martín de Porres permanecerán hasta el 17 de agosto en Arequipa. Las reliquias depositadas en una urna de madera recorren el país desde marzo por los 50 años de su canonización. La orden dominica continuará con la gira por Puno, Cusco y Puerto Maldonado.
Arequipa.
Un día, en la primera década del siglo XVII, en el monasterio de Santo Domingo en Lima, el hermano ropero a cargo del cuidado de los hábitos de los frailes descubrió que los ratones agujerearon las prendas. Así que cogió una escoba dispuesto a acabar con el primer roedor que se le cruzara en el camino. Fray Martín de Porres le pidió piedad.
El santo mulato tomó en sus manos al roedor y lo reprendió. "Vaya hermano ratón y diga a sus compañeros que no molesten, que se retiren a la huerta, yo les daré de comer allí". Increíblemente, después hubo una junta de muchos ratones en el huerto. También llegaron perros y gatos. Estos animalitos, enemigos por naturaleza, convivieron en paz, previa invocación del peculiar santo. Pero las preocupaciones de San Martín no solo giraban en torno a los animales. También evitaba que los matrimonios se separen, como ocurrió con su sobrina Catalina de Porres y Melchor Gonzáles. El varón estaba por abandonar el hogar. El santo apareció -por ubicuidad, don de estar en dos sitios a la vez- y conversó con los esposos. Escuchó sus problemas y los ayudó a reconciliarse.
Ese fue Martín de Porres, según Guillermo Álvarez O.P., sacerdote autor de un libro del santo mulato. Destaca que tuvo muchos dones sobrenaturales, como la sanación y la ubicuidad, además de ser caritativo y servicial, canonizado en 1962 por Juan XXIII.
Cecilia Mendoza C.
Mas informacion en :
http://decimaterceracuadrillasanmartin.blogspot.com/
