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PAPA Robert : LEON XIV y ESCUDO Pontificio 2025

PAPA Robert : LEON XIV y ESCUDO Pontificio 2025
PAPA Robert: LEON XIV y ESCUDO Pontificio 2025

domingo, 9 de junio de 2013

Las Expectativas ante el Pontificado de S. S. Francisco


 
 
 
Carlos Cardó SJ: Nuestras expectativas ante el pontificado de Francisco 
 
El P. Carlos Cardó SJ, Párroco de "Nuestra Señora de Fátima" (Miraflores, Lima) y antiguo Asistente del Superior General de los Jesuitas para América Latina Meridional, comparte con nosotros sus expectativas ante el pontificado de Jorge Mario Bergoglio, el Papa Francisco.

 
1. Nomen est omen: el nombre es destino

«Francisco, ve y repara mi casa, que, como ves está toda en ruinas». Fue la voz del Crucificado que el Poverello de Asís escuchó cuando oraba en la pequeña capilla de San Damián. Reparar y renovar una Iglesia amenazada por la decadencia, los escándalos y las divisiones internas.
Para lograrlo, Francisco opta por despojarse de todo aquello que puede situarlo en un nivel de superioridad y dominio, lejos de sus hermanos. Escoge a cambio la pobreza evangélica porque ser pobre según el evangelio es ser libre para servir desinteresadamente, rechazar todo aquello que puede estorbar las relaciones con los demás, capacidad de sentir como propia la necesidad del otro, vincular, no dividir, ser pacífico y fraterno con todas las criaturas.
Asís, su lugar de nacimiento, es hoy un símbolo de la paz mundial y del encuentro ecuménico con todas las tradiciones religiosas. Francisco quiso acercarse a todos, dialogar con todos, incluso con el Sultán de Constantinopla. Y su largo y trabajoso empeño por la paz le dejó abiertas en su cuerpo las heridas de Cristo, los estigmas de su pasión. La renovación de la Iglesia y del mundo no es tarea fácil.
Al adoptar el Cardenal Jorge Mario Bergoglio el nombre de Papa Francisco, sabe bien que este es su camino y su destino, su modo característico de proceder y la meta a la que debe llegar y ayudar a llegar a la Iglesia. Cuando le preguntan por qué se llama Francisco él responde con unas palabras inolvidables:
"… En relación a los pobres pensé en Francisco de Asís. Después, pensé en las guerras, mientras el escrutinio proseguía, hasta contar todos los votos. Y Francisco es el hombre de la paz. El hombre que ama y custodia la creación, en este momento en que nosotros tenemos con la creación una relación no muy buena, no? Es el hombre que nos da este espíritu de paz, el hombre pobre. ¡Ah, cómo querría una Iglesia pobre y para los pobres!".


Jorge Mario Bergolio es jesuita. La espiritualidad franciscana y la ignaciana armonizan muy bien. Siempre, desde San Ignacio, que se convierte a Cristo después de leer la vida de San Francisco, ha habido muy buenas y estrechas relaciones entre ambas órdenes. Ambas nacen en épocas convulsionadas y de grandes cambios como la nuestra actual. Francisco se movía a impulsos de la utopía divina del amor gratuito y desinteresado, que no se deja atrapar por las cosas materiales. Ignacio vivía la utopía también divina de la misión, que exige libertad: libres para amar, libres para servir en las fronteras religiosas, culturales, socioeconómicas. Ambos, Francisco e Ignacio, vuelven a la fuente, se nutren en la fuente más transparente, fresca y radical del cristianismo: las Bienaventuranzas.
Al escoger el nombre, ha escogido un destino.

2. Obispo de Roma

Así le gusta presentarse y este gesto tiene un importante contenido teológico. El concilio Vaticano II afirma que la responsabilidad del Papa se une íntimamente a la del colegio de los obispos. Porque así como por disposición del Señor, Pedro y los apóstoles formaban un solo Colegio apostólico, así se unen el Papa, sucesor de Pedro, y los obispos, sucesores de los apóstoles, con el vínculo de la unidad, la caridad y la paz (Lumen Gentium 22). Pero el Papa no es sólo un primus inter pares, primero entre iguales, como reclaman algunas iglesias ortodoxas. Según la doctrina católica, el obispo de Roma, sucesor directo de Pedro, tiene una función de presidencia efectiva sobre toda la Iglesia, "plena, suprema y universal potestad" (LG 22). Por ello tiene autoridad para definir los asuntos debatidos y tomar la última decisión en cualquier materia doctrinal, moral o disciplinar. Por ejemplo, si se pusiera en el tapete la cuestión del sacerdocio para casados, o la comunión para los divorciados, o cosas de este estilo que actualmente se debaten, el Papa tendría que ser quien las defina. A Pedro se le dieron las llaves, es decir, la autoridad para definir y sancionar, afirmar o negar, incluir o excluir en materia doctrinal y disciplinar dentro de la Iglesia de Cristo.
Esto, sin embargo, no significa que la función del Vicario de Cristo pueda reducirse simplemente a la de una instancia de última apelación. En su labor magisterial el Papa no actúa solo y por su cuenta. Él sabe muy bien que, en la búsqueda de la comunión eclesial, a la hora de definir la interpretación de los contenidos de la fe y de la moral cristiana, tal como se nos han transmitido en la Sagrada Escritura y en la enseñanza de los apóstoles, es de vital importancia contar con el sentido de la fe de los creyentes (sensus fidelium) y con la teología. Por ello el concilio Vaticano II insiste en la estrecha articulación que debe procurarse entre el magisterio del colegio apostólico con su cabeza, que tiene la "misión de interpretar auténticamente la palabra de Dios escrita o transmitida" (Dei Verbum 10; cf LG 25), y el magisterio "interior" del Espíritu, presente en todos los bautizados, por su participación en la función profética de Cristo y de la Iglesia (cf LG 12.35.37; DV 8). Hay, pues, según el Vaticano II, la necesidad de complementariedad entre Iglesia docente y discente en el ejercicio de la corresponsabilidad eclesial.
 
Pedro fue el primero entre los Doce apóstoles porque Cristo personalmente lo eligió y por eso lo hizo el primer testigo de su resurrección, como reconoce San Pablo (1 Cor 15, 3-5). Pedro es el testigo singular, el referente. Y debe también ejercer una misión de animación y de unión dentro del mismo cuerpo de la Iglesia. Esto es de suma importancia porque la fe, que él ha de testimoniar y promover, no se limita a un conjunto de ideas o doctrinas, normas y reglamentos, sino que es fundamentalmente y ante todo una manera de vivir que brota de una relación personal con Cristo.
Es competencia del obispo de Roma, además, fomentar la participación de los obispos en la conducción y guía del pueblo de Dios, es decir en el gobierno pastoral de la Iglesia. Al igual que el vínculo estrecho que une al obispo de Roma con el colegio episcopal, el Vaticano II (LG 23) pone de relieve el vínculo efectivo que debe darse entre Roma y las iglesias locales (diócesis), entre lo universal y lo particular. Es la llamada "colegialidad", que incluye entre otras cosas, comunicación, mutuo conocimiento y respeto de la diversidad, adaptabilidad, intercambio de experiencias, diálogo en los niveles de decisión, todo esto en un marco de respeto a la autoridad y búsqueda continua de la unidad.
Hay que reconocer, sin embargo, que la puesta en práctica del principio de la colegialidad ha sido siempre problemática. Falta aún mucho camino por recorrer para hacer realidad los planteamientos establecidos por el Concilio Vaticano II, que abrió la puerta a una mayor participación en el gobierno, a una mayor autonomía de las iglesias locales, a un verdadera inculturación de la presencia y tarea de la Iglesia en las diversas regiones del mundo, a una efectiva colegialidad en todos los niveles del gobierno, de la enseñanza, de la transmisión del mensaje cristiano y de la liturgia. Todas estas perspectivas de reforma parten del supuesto de que no todos los problemas y cuestiones se pueden resolver a nivel planetario o universal y que es lógico suponer que una decisión puede convenir en un lugar pero no en otro.
No se trata de empobrecer o debilitar la figura del Papa, sino de buscar –en una sociedad globalizada– la manera de mantener intacto el rol preponderante que le corresponde al ministerio petrino (al servicio del Papa), sin el cual simplemente no se conservaría la unidad, pero dando al mismo tiempo efectiva responsabilidad a las iglesias locales. La insistencia con que el Papa Francisco se ha querido presentar a sí mismo como "obispo de Roma" (y no como Papa o Sumo Pontífice), lejos de ser un simple detalle formal de tratamiento, permite suponer que el tema de la participación colegial está presente en su pensamiento.

3. La problemática eclesial

Sería ingenuo pensar que la problemática de la Iglesia actual, con toda su carga de escándalos, que probablemente la han conmovido más que cualesquiera otros problemas producidos en los últimos cinco siglos, no haya influido decisivamente en el discernimiento hecho por los cardenales para elegir a la persona más adecuada. Abusos sexuales causados por el clero, silencio cómplice de muchos obispos y superiores, utilización malévola, satánica del escándalo con fines lucrativos, amén de todo aquello que se ha producido en el corazón mismo de la Iglesia y que ha llenado las páginas de los periódicos no sólo de la prensa amarilla, respecto a la administración de las finanzas del Vaticano acusada de permisividad respecto al lavado de dólares…, todo eso inevitablemente causa desánimo y dolor, dolor filial y familiar, y hace que uno se pregunte: ¿qué hacer para que la Iglesia recupere aquello que por esencia es y debe seguir ejerciendo con absoluta credibilidad: Maestra de conciencias, luz de las naciones, Mater et Magistra? Este tipo de preguntas y muchas otras más que Uds. se han planteado o han oído plantear a sus hijos respecto a la autoridad moral de la Iglesia en la sociedad actual han constituido la atmósfera cargada dentro de la cual se celebró el Cónclave en el que se eligió a Jorge Mario Bergoglio.

¿Y quién es Jorge Mario Bergoglio Sivori?, ¿qué conocimiento de él tenían los cardenales?, ¿qué han podido ver en él para considerarlo el más adecuado en estos momentos cruciales que vive la Iglesia?
Ante todo un hombre que ha vivido una densa experiencia de gobierno y ha sido preparado por Dios a lo largo de ella, haciéndolo capaz de superar limitaciones y errores humanos (¡quién no las tiene y quién no los ha cometido!), fortaleciendo su voluntad y capacidad de ejercer la autoridad, desarrollando al mismo tiempo todo ese talante de bondad (ternura, le gusta decir a él), sencillez y cercanía que expresa con el lenguaje espontáneo y no verbal de sus gestos cotidianos.
Fue superior provincial de los jesuitas en Argentina durante el gobierno de la Junta Militar, época terrible… Versiones radicalizadas de la Teología de la Liberación llevaban a miembros del clero y religiosas a comportamientos no siempre prudentes y sensatos. Él opta por "cerrar" la provincia y desactivar los centros sociales y obras en las que se podía incurrir en problemas de orientación y caer en el riesgo de ser intervenidos por los militares. Su modo de gobierno se endureció, la provincia se dividió. Uno de los hechos más dolorosos ocurridos en esa época fue el arresto y tortura de dos jesuitas, Orlando Yorio y Francisco Jalics, atribuidos injusta y tendenciosamente a Jorge Mario Bergoglio por Horacio Verbinsky, un periodista vinculado al gobierno Kirchner. Hace unos días un amigo personal de Orlando Yorio, refiriéndose a lo difícil que debió ser para el Provincial Jorge Mario Bergoglio el gobernar a los jesuitas argentinos en aquellos años funestos, llega a la siguiente conclusión: "Tener responsabilidades institucionales y sobre personas es terrible. Es una permanente elección del mal menor en pleno frente de batalla. No son disquisiciones en escritorio confortable. Hay quienes hacen gárgaras con los dolores ajenos. Que se animen a presentar pruebas y no suspicacias".
Se ha dicho en algunos medios de prensa que los Superiores de la Compañía silenciaron a Bergoglio después de ser provincial, confinándolo en Córdoba. Lo cierto es que, después de confiarle el cargo de rector de las facultades jesuitas de teología y filosofía en Buenos Aires, se le envió a Alemania para hacer un doctorado en teología y luego a Córdoba para escribir su tesis doctoral y trabajar pastoralmente. En su segundo año en esa ciudad, el 20 de mayo de 1992, es consagrado obispo y a partir de entonces pone de manifiesto una serie de cualidades humanas y espirituales que antes, en su época de provincial, no se le habían apreciado. Todo lo que se dice de él es cierto: que está cerca de los pobres, que quiere y atiende a sus curas enfermos o cansados, que vive pobremente y se prepara él mismo la comida, que prefiere movilizarse en transporte público, que la gente lo quiere por su bondad y sencillez, que es valiente a la hora de denunciar la corrupción pública, defender los derechos de las personas y reprobar el aborto, la eutanasia, la trata de personas…
Como Arzobispo de Buenos Aires y Cardenal muy pronto se da a conocer en el episcopado latinoamericano. Su fama de hombre espiritual, "contemplativo y místico", como dice el Card. Juan Luis Cipriani, circula de boca en boca. En la última Conferencia General del Episcopado Latinoamericano en Aparecida, Brasil, el año 2007, su actuación fue determinante: presidió la comisión encargada de redactar el documento conclusivo que recoge las orientaciones dadas por los obispos para la tarea evangelizadora de la Iglesia en nuestro continente.
En resumen: es hombre de gran experiencia, madurado en el sufrimiento, resistente a crisis y situaciones de conflicto, espiritual, honesto, humilde, firme y valiente.

4. La Curia Romana

Para el ejercicio de sus funciones, el Papa cuenta con la llamada Curia Vaticana. Por eso es lo primero que el Papa Francisco ha tenido que enfrentar. Son los organismos ejecutivos y de consejo inmediatos con que habrá de contar para realizar sus planes. O lo respaldan, animan y asesoran bien o lo obstaculizan, traban sus decisiones y pueden llegar hasta maniatarlo. La historia da ejemplos de todas estas posibilidades que se le pueden presentar.
¿Qué es la Curia? Una compleja institución encargada de hacer efectivo el gobierno papal en todos los ámbitos de la vida eclesial. Está compuesta, en primer lugar, por el organismo más cercano al Papa, la Secretaría de Estado, que cuenta con dos secciones: una dedicada a las relaciones con los Estados y otra para todo lo referente al gobierno interno de la Iglesia. Debajo del Papa y del Secretario de Estado hay nueve Congregaciones o dicasterios, semejantes a los ministerios, y doce Consejos Pontificios. Se cuenta con tres organismos de administración y finanzas, tres tribunales, la Biblioteca Vaticana, los Archivos Vaticanos, la Sala de prensa y la Prefectura de la casa pontificia.
¿Burocracia? El problema no es ese. Podría haber aún más dependencias dada la magnitud y complejidad de la vida y acción de la Iglesia católica en todo el mundo. El problema es el personal, su distribución y su selección. Hay Congregaciones con muy pocos funcionarios y no todos idóneos ni todos encargados de funciones realmente ejecutivas. "Hay en la Curia numerosas personalidades eminentes" sin duda, como ha afirmado el Card. Julián Herranz, pero también es verdad que hay mucha mediocridad en las oficinas. Por eso tardan tanto las gestiones y se acrecienta -a veces sin la debida coordinación- la producción de documentos.
Un asunto especialmente problemático porque refleja la disfuncionalidad de la actual organización y la inadecuada administración del personal es lo referente a los Nuncios. Hay más de 180 representaciones diplomáticas (Nunciaturas) de la Santa Sede en el mundo, sólo le superan los Estados Unidos, pero todas convergen en la Secretaría de Estado que además de las relaciones con otros Estados tiene que gestionar también los asuntos internos de la Iglesia, como ya hemos dicho. El "embotellamiento" de los problemas es inevitable. Añádase a esto el hecho de que no todos los nuncios que egresan de la famosa Academia Pontificia demuestran igual nivel de capacitación.
Todo esto hace desear un nuevo sistema de reclutamiento y selección del personal para los distintos organismos del gobierno central de la Iglesia, un sistema que tenga en cuenta el bien del conjunto, que no esté condicionado por intereses personales o de grupo (se ha llegado a distinguir bandos entre los funcionarios), y que tenga como exigencia principal la adecuada preparación y capacidad espiritual y profesional de los candidatos. La Curia Vaticana no es un organismo cualquiera de gobierno. Desde el punto de vista cristiano, ella está al servicio de la mayor de las causas: la realización de la misión evangelizadora confiada por Cristo a Pedro y los Apóstoles. Por eso se la llama la Santa Sede Apostólica y ha de demostrar con transparencia que realmente lo es, no una plataforma administrativa sobre la cual se generan y canalizan centros de poder y, por tanto, ambiciones en la carrera eclesiástica.

5. Aspiraciones

Dejando volar la imaginación o dando libre cauce a nuestros deseos, podríamos decir que esperamos del Papa Francisco y rogamos a Dios:
Que sea por encima de todo un signo vivo del evangelio en el mundo y, en particular, de la buena noticia para los pobres. Es decir, que sea capaz de lograr lo que dijo en su primera declaración: "¡Ah, cómo querría una Iglesia pobre y para los pobres!".
Que convenza al mundo de la fuerza transformadora de la humildad. No se cree en el valor humildad porque se cree únicamente en el valor poder, fuerza, riqueza material. El Papa debe ser ante todo un hombre, no debe ocultarlo bajo el ropaje de la grandeza y suntuosidad. Ha de recordar que sigue a un hombre llamado Pedro, que, por negar a su Señor, pudo reconocerse pecador amado y enviado a confortar a sus hermanos. No por ser humilde Pedro deja de ser grande, el elegido del Señor. No porque el Papa deje el oro y los zapatos rojos va a dejar de ser el Vicario de Cristo en la tierra, mediación histórica de la presencia siempre viva de Jesús el Buen Pastor. Esa es su gloria y su desafío. Porque como dice la teóloga Dolores Aleixandre no hay que confundir "la dignidad con la magnificencia y lo solemne con lo suntuoso".
Que promueva una efectiva nueva evangelización que ha de comenzar por la reforma espiritual de la Iglesia misma, ha de reflejarse en el ardor místico y santidad de sus pastores, y ha de llegar a la transmisión de un mensaje de vida y esperanza, no de tantas normas y prevenciones que hacen de la predicación no el kerigma de la salvación sino una tediosa e ineficaz exhortación moralista. Al hombre secularizado de hoy no le va a mover eso; le atraerá, sí, el testimonio de las personas que viven lo que predican, y la calidad de su predicación que toca la vida de sus oyentes. Y que no olvide la sabia intuición de su gran predecesor Paulo VI quien, en su encíclica sobre la evangelización justamente, Evangelii nuntiandi, recordó a la Iglesia que la característica esencial de la evangelización es el diálogo.
Que sea realmente un pastor, que gobierne y guíe, con capacidad de decisión para purificar y reorganizar instituciones y enseñar a ejercer el único estilo de gobierno que Jesucristo estableció para su Iglesia en todos los niveles de ella: el gobierno como servicio; o como el mismo Papa Francisco lo manifestó en la homilía de inicio de su Pontificado: "El verdadero poder es el servicio".
Que prosiga con su misma fuerza de decisión la política de "tolerancia cero" de Benedicto XVI para erradicar de la Iglesia el cáncer de la pedofilia y de todo abuso que hiere a las personas, y asimismo para hacer pasar por un estricto sistema de control ético a la administración del dinero del Vaticano, que en buena parte es fruto de la generosidad de los fieles y está destinado a los pobres del mundo.
Que se acerque a las otras familias religiosas del mundo y haga que ellas se acerquen fraternalmente a los cristianos, especialmente el Islam.


Y, para terminar, quisiera proyectar la imagen de Francisco de Asís ante el Papa Inocencio y del Papa Francisco ante Francisco de Asís. Al ver ante sí a Francisco, el Papa Inocencio III desciende de su trono, se acerca al Poverello, le toma de las manos, se arrodilla ante él y le besa los pies. Como alguien ha dicho, aquello significó la alianza de la Iglesia con la palabra viva del Evangelio. Jorge Mario Bergoglio, al adoptar el nombre de Francisco, repite el gesto de su predecesor Inocencio, pone a la Iglesia al servicio de los valores del Evangelio, hace actual lo que el pobre de Asís representa para la Iglesia y se postra ante él para "reparar" a la Iglesia de Cristo, revistiéndola para ello con el manto de la pobreza, sencillez, humildad y amor a los pobres.
Escrito por el  P. Carlos Cardó SJ, Párroco de "Nuestra Señora de Fátima" (Miraflores, Lima)

JMJ RIO 2013
AÑO DE LA FE

Homilía del X Domingo del T.O.

Al ver el dolor sintió lástima

Lectura y Homilía del Décimo Domingo del T.O.

Domingo, junio 09, 2013
Lucas 7: 11 - 17


11 Y sucedió que a continuación se fue a una ciudad llamada Naím, e iban con él sus discípulos y una gran muchedumbre.
12 Cuando se acercaba a la puerta de la ciudad, sacaban a enterrar a un muerto, hijo único de su madre, que era viuda, a la que acompañaba mucha gente de la ciudad.
13 Al verla el Señor, tuvo compasión de ella, y le dijo: «No llores.» 14 Y, acercándose, tocó el féretro. Los que lo llevaban se pararon, y él dijo: «Joven, a ti te digo: Levántate.»
15 El muerto se incorporó y se puso a hablar, y él se lo dio a su madre.
16 El temor se apoderó de todos, y glorificaban a Dios, diciendo: «Un gran profeta se ha levantado entre nosotros», y «Dios ha visitado a su pueblo».
17 Y lo que se decía de él, se propagó por toda Judea y por toda la región circunvecina.

Palabra de Dios

 

"Orar los evangelios"

Escrito por P. José Ramón Martínez Galdeano, S.J.

Aunque no sea lo más importante, al evangelio de San Lucas se le reconoce como característica la de estar literariamente muy bien escrito. Un escritor francés, Ernesto Renán, increyente y gran enemigo de Iglesia, dijo de él que "era el libro más bello que se haya escrito jamás". La narración de hoy viene a ser un ejemplo. Jesús se acerca a Naím, son muchos los que le acompañan, "mucho gentío". Y he aquí que se encuentran con otro grupo también grande. Es un entierro. En dos pinceladas destaca la impresión de dolor: se trata de un muchacho joven, de su madre viuda, que queda sola y tal vez desamparada. Es una mujer querida y respetada, pues son un gran gentío los que la acompañan. Jesús no se limita a ceder el paso al cortejo con respeto. Se fija en la mujer. Se conmueve. "Al verla, le dio lástima; le dijo: no llores". En los datos externos Lucas nos adentra en lo interior: el dolor de la madre; la sorpresa, admiración, alegría y sentido religioso de la gente; la bondad y la sintonía de Jesús con el dolor ajeno. Nadie le pidió que hiciera nada, ni parecía que debía hacerlo. No lo hace para demostrar su poder, ni su mesianismo, ni su divinidad. Lo hace simplemente por compasión, porque el dolor de aquella madre le ha impactado y no puede dejar de hacer "algo", es decir lo que pueda. Brevemente lo señala Lucas: no llores, se acerca al ataúd, se paran los portadores, y Jesús, sin que nadie le haya pedido nada, sin alardes ni gestos de teatro manda al cadáver que se levante y he aquí que el muerto se incorpora y empieza a hablar y quitarse los vendajes. ¿Algo más? Muy poco. Tal vez Jesús le agarre de la mano o ponga la suya a su espalda, como entregándolo a la madre como un don de Dios, su Padre. Mientras madre e hijo se abrazan entre lágrimas, mientras tantos amigos expresan alegría y, personas de fe, reconocen que es obra de Dios y Jesús es su enviado –"daban gloria a Dios diciendo: un gran profeta ha surgido entre nosotros, Dios ha visitado a su pueblo"–, Lucas no añade ningún detalle más. Así es Jesús; que cada uno lo contemple y saque sus conclusiones.
Con frecuencia los fieles, tocados por la gracia, se preguntan y preguntan: ¿Y cómo orar con los evangelios? Creo que en el evangelio de hoy tenemos una respuesta y que, en general, el evangelio de San Lucas es muy bueno para introducirse en la oración.
"De muchos modos habló Dios en el pasado a nuestros padres por medio de los profetas; en estos últimos tiempos nos ha hablado por medio del Hijo". Así nos dice la Carta a los Hebreos (1,1). Por medio de Jesús, que es el único mediador (1Tm 2,5), el Padre nos ha manifestado y nos quiere seguir manifestando y otorgando todo lo que necesitamos para nuestra salvación.
Ha sido Dios el que ha tomado la iniciativa de nuestra salvación y lo ha hecho con su Palabra. "Y la Palabra se hizo carne y habitó entre nosotros". Esta Palabra está especialmente en la Escritura y sigue hablando a los hombres en la Iglesia. Es una Palabra viva. Dios mismo de modo maravilloso, pero real, la sigue pronunciando en lo íntimo de cada corazón a quien la lee con fe. Orar con la Biblia, con los evangelios especialmente, requiere leerlos como tal palabra viva y actual de Dios, de Jesús, para mí. Es muy importante tomar conciencia, cuando cogemos la Biblia, de que vamos a escuchar a Dios.
Importante es ponernos en una postura corporal que interiormente y desde el cuerpo nos alerte de que estamos en la presencia del Señor que nos va hablar.
Leamos el texto, entrando en él. Ocurrió, se escribió y ha llegado a nosotros para que nos ayudase a conocer, amar y seguir a Cristo. Procuremos meternos dentro, viendo y escuchando todos los detalles. ¿Qué me dice de Jesús? ¿Cómo es, cómo piensa, cómo siente? ¿Me dice algo sobre mi vida, mis modos de pensar, mis modos de sentir y obrar, mi forma de relacionarme con Dios y con los hombres? Dios me está hablando.
Tras escuchar a Dios, Él espera mi respuesta. Unas veces será reconocer mis defectos, pecados o falta de virtud, y pediré perdón y luz y gracia para corregirme. Otras veces será reconocer y agradecerle por su comprensión y su amor. Siempre deberá ser para que me cambie el corazón a su imagen.
Por fin esos momentos de intimidad con el Señor son oportunos para pedirle su ayuda y su gracia para con nosotros, para las personas que nos son queridas o nos han pedido que oremos, para la Iglesia, por las necesidades espirituales y temporales que nos preocupan. Podemos entonces invocar la ayuda de María, de nuestro Ángel Custodio y de santos de nuestra devoción.
Orar es fácil. No piensen que sea necesario sentir muy fuertes el amor de Dios, o su presencia. En nuestras relaciones humanas hay momentos cumbres en que se expresan sentimientos muy hondos que entonces afloran; pero no es lo más normal. Tampoco para orar, que es hablar con Dios, son necesarios sentimientos intensos. Es bueno tenerlos y es verdad que la fe en la presencia de Dios y de su amor nos los susciten con cierta frecuencia, pero también sin ellos la oración es una comunicación con Dios, que sabemos que Él escucha. De esta manera procedemos frecuentemente en la vida y nadie piensa que estamos mintiendo. Quien da gracias a Dios porque le ha escuchado o le ha sorprendido con algo bueno para él o una persona querida, quien le pide perdón por alguna falta, quien ruega por sus hijos u otras personas, sabe que Dios le escucha y que le ama y eso es bueno, sienta algo especial o no lo sienta. Pidamos a María que nos enseñe como a niños hijos suyos.
 
AÑO DE LA FE
 
JMJ RIO 2013
 

07.07 Dia de la Bandera

 

 
Por el Dia de la Bandera
 
En el corazón de todos los peruanos se ha escrito, con el valor de Bolognesi y los héroes de Arica, un sentimiento profundo de peruanidad, que se acrisola en el alma nacional en una frase inmarcesible a los tiempos: "Tengo deberes sagrados que cumplir y los cumpliré hasta quemar el último cartucho" . Esos deberes que nuestros héroes los tenían muy claros: la lealtad, el patriotismo, el martirio por una causa noble y justa, han forjado el Perú de ayer y cimientan el Perú de hoy que se desarrolla, avanza y crece enfrentando nuevos desafíos, alcanzando grandes objetivos, consciente de las grandes oportunidades que la historia actual le ofrece.

El alma peruana ha sido tejida en su profundidad por los principios del Evangelio de Jesucristo entrelazados con los valores del Imperio de los Incas y las gestas de la República. Esta identidad nacional, pacífica pero indómita, se expresa en diversas manifestaciones culturales, sociales y patrióticas. Pero de modo especial en expresiones religiosas donde se resalta una Cristología arraigada en los más diversos estratos sociales y en la total diversidad geográfica de nuestra patria. Al punto que podemos decir que no hay peruano en cuya historia personal y familiar esté ausente Jesucristo. Así lo atestiguan las multitudes que peregrinan al Qolluriti, que visitan al Señor del Mar o acompañan al Señor de los Milagros.

Arica y la Bandera se han unido en la historia como un binomio que simboliza una Patria Libre y digna. En la Bandera bicolor encontramos el Perú que amamos, como en la Cruz, símbolo de la victoria, encontramos al Dios que nos ama. Por eso, podemos preguntarnos hoy: ¿si hay una bandera que representa y simboliza al Perú, como a cada nación, habrá también una bandera que simbolice a la humanidad entera en su más pura realidad? Y, podemos concluir con las enseñanzas de la Sagrada Escritura, que si la hay y esa es la bandera de la vida. En ella se identifican creyentes y no creyentes, católicos y todas las entidades religiosas que apuestan por el bien y la paz. No se puede ser humano y no defender la vida; no se puede defender la libertad negando el derecho a la existencia; la defensa de la vida digna, como nos enseñó Bolognesi al inmolarse en el morro de Arica, nos exige una opción por la vida y por la defensa de la dignidad de toda persona humana, especialmente del más débil y del más pobre, a la luz de un humanismo fiel al hombre.

En el Evangelio que acabamos de escuchar podemos encontrar una respuesta a los retos que la historia nacional hoy nos plantea: la erradicación de la pobreza en los campos, la superación de la inseguridad en las ciudades, el triunfo sobre la sombra de la violencia que oscurece el cielo de la esperanza. Jesucristo nos enseña que no se puede construir sobre la arena de la avaricia, de la imposición o de la corrupción, como nos ha recordado con sencillez paternal el Papa Francisco. La construcción de la ciudad verdaderamente humana se hace sobre dos principios: uno eterno: Dios es el Señor de la Misericordia que está presente en nuestra historia, y el otro: un referente esencial: la dignidad del hombre. Unidos y sin separación, la creatura al Creador, sostienen los cimientos de la ciudad a construirse. Si no se construye bajo el amor de Dios la ciudad no se conservará.

Que Dios, el Señor de los Ejércitos, bendiga al Perú, en cuya enseña roja y blanca hoy nos unimos para reafirmar nuestro compromiso de entregar la vida si fuera necesario para conservarlo libre y soberano y que mantenga nuestra nación fuerte en la fe, lejos de la sobra de la guerra y siempre unida para conseguir su libertad y desarrollo.

Así sea.
P. Guillermo Inca Pereda OSJ
Secretario Adjunto


Informativo Nº 756 elaborado por la Oficina de Prensa de la Conferencia Episcopal Peruana

08.06 Inmaculado Corazon de Maria 2013




Fiesta del Inmaculado Corazon de Maria
María, Madre de Jesús y nuestra, nos señala hoy su Inmaculado Corazón. Un corazón que arde de amor divino, que rodeado de rosas blancas nos muestra su pureza total y que atravesado por una espada nos invita a vivir el sendero del dolor-alegría.
La Fiesta de su Inmaculado Corazón nos remite de manera directa y misteriosa al Sagrado Corazón de Jesús. Y es que en María todo nos dirige a su Hijo. Los Corazones de Jesús y María están maravillosamente unidos en el tiempo y la eternidad...
 



 


Historia de la Devoción
La historia de la devoción del Inmaculado Corazón se inicia en el siglo XVII, como consecuencia del movimiento espiritual que procedía de San Juan Eudes.
Más adelante, en diciembre del año 1925 la Virgen Santísima se le apareció a Lucía Martos, vidente de Fátima, y le prometió asistir a la hora de la muerte, con las gracias necesarias para la salvación, a todos aquellos que en los primeros sábados de cinco meses consecutivos, se confesasen, recibieran la Sagrada Comunión, rezasen una tercera parte del Rosario, con la intención de darle reparación.
En la tercera aparición de Fátima, Nuestra Madre le dijo a Lucía: "Nuestro Señor quiere que se establezca en el mundo la devoción al Corazón Inmaculado. Si se hace lo que te digo se salvarán muchas almas y habrá paz; terminará la guerra.... Quiero que se consagre el mundo a mi Corazón Inmaculado y que en reparación se comulgue el primer sábado de cada mes.... Si se cumplen mis peticiones, Rusia se convertirá y habrá paz.... Al final triunfará mi Corazón Inmaculado y la humanidad disfrutará de una era de paz."
En un diálogo entre Lucía y Jacinta, ella, de diez años, dijo a Lucía: "A mí me queda poco tiempo para ir al Cielo, pero tú te vas a quedar aquí abajo para dar a conocer al mundo que nuestro Señor desea que se establezca en el mundo la devoción al Corazón Inmaculado de María".
"Diles a todos que pidan esta gracia por medio de ella y que el Corazón de Jesús desea ser venerado juntamente con el Corazón de su Madre. Insísteles en que pidan la paz por medio del Inmaculado Corazón de María, pues el Señor ha puesto en sus manos la paz del mundo."
El Papa Pío XII, el 31 de Octubre de 1942, al clausurarse la solemne celebración en honor de las Apariciones de Fátima, conforme al mensaje de éstas, consagró el mundo al Inmaculado Corazón de María.
Asimismo, el 4 de mayo de 1944 el Santo Padre instituyó la fiesta del Inmaculado Corazón de María, que comenzó a celebrarse el 22 de Agosto. Ahora tiene lugar el Sábado siguiente al Segundo Domingo de Pentecostés.

http://www.aciprensa.com/


2012 - AÑO DE LA FE - 2013

El Papa Francisco dialoga con los jóvenes estudiantes de las escuelas de jesuitas: “sean magnánimos”




Preparativos para el Gran Encuentro


" Es una fiesta porque nuestro Papa es jesuita"

(RV).- Más de 9.000 alumnos y exalumnos de las escuelas de jesuitas de Italia y Albania disfrutan el viernes 07 de junio, de un encuentro con el Santo Padre en el Vaticano. Los participantes  prepararon vídeos, dibujos y otros regalos para el Papa. Fue un encuentro lleno de emociones y orgullo. Para los que no puedan participar se ha preparado una web llamada ‘www.dalpapa.it' y un sitio Facebook, con el mismo nombre, para que puedan seguir el encuentro desde muy cerca.

En la presentación del evento celebrado en Radio Vaticano el 6 de junio entrevistaron al padre Massimo Nevole, coordinador de los pastoralistas en colegios de jesuitas en Italia y a Staffano Mistura, viceministro de Asuntos Exteriores de Italia y exalumno del colegio jesuita Massimo de Roma. Quienes nos explican lo que ha influido la educación jesuita en sus vidas.
. RealAudioMP3 (MZ.RV)



Llego el día del Encuentro

El Papa Francisco dialoga con los jóvenes estudiantes de las escuelas de jesuitas: "sean magnánimos"  

(RV).- (audio)RealAudioMP3 Al mediodía, el Papa Francisco recibió a una ingente y alegre representación de estudiantes de las escuelas que dirigen los jesuitas en Italia y Albania. Más de 8 mil personas: jóvenes con sus familias, profesores y amigos, han llenado el Aula Pablo VI del Vaticano. Fue una especie de feliz fiesta de final de curso que vino precedida, antes de la llegada del Papa, por momentos de animación y testimonio.
Pero llegado el momento del discurso, el Santo Padre les ha dicho que cinco páginas eran demasiado, que resultaría muy aburrido. Y ha propuesto entregarles el discurso por escrito, resumiendo en pocas palabras el sentido del mismo, para pasar luego a un vivo diálogo, en directo, de preguntas y respuestas entre los alumnos y el Santo Padre.
Siguiendo el camino de san Ignacio de Loyola, que entendió que “Jesús enseña a vivir bien, a dar un sentido profundo a nuestra existencia”, el Santo Padre en su discurso escribe a los muchachos que sigan con “entusiasmo, alegría y esperanza a éste gran Maestro de vida que no sólo enseña, sino que invita a seguirle”.
“El elemento principal en la escuela -afirma el Papa- es aprender a ser magnánimos: tener un corazón grande, tener grandes ideales, el deseo de cumplir grandes cosas, pero también pequeñas cosas, para responder a lo que Dios nos pide”. Y tras hablarles de las virtudes humanas insiste en dos grandes valores: la libertad y el servicio.
Para ser magnánimos con libertad interior y espíritu de servicio se requiere la formación espiritual. ¡Queridos chicos, queridos jóvenes, amen cada vez más a Jesucristo! Nuestra vida es una respuesta a su llamada y ustedes serán felices y construirán bien su vida si saben responder a esa llamada. Sientan la presencia del Señor en su vida. Él está cerca de cada uno de ustedes como compañero, como amigo, que les ayuda comprender, que les alienta en los momentos difíciles y nunca les abandona. En la oración, en el diálogo con Él, en la lectura de la Biblia, descubrirán que Él está realmente cerca. Y aprendan también a leer los signos de Dios en su vida. Él siempre nos habla, incluso a través de los hechos de nuestro tiempo y de nuestra existencia cotidiana: a nosotros nos corresponde escucharlo.
Luego, el Santo Padre Francisco dirigiéndose a los educadores: jesuitas profesores y padres, les exhorta a que no se desanimen ante las dificultades que presenta el desafío educativo. “Denles a los jóvenes esperanza, optimismo para afrontar su camino en el mundo. Enséñenles a ver la belleza y la bondad de la creación y del hombre. Pero sobre todo sean coherentes testigos con su vida de lo que les comunican.
¡Sin coherencia no es posible educar! Todos ustedes son educadores, no pueden delegar competencias en esta materia. La colaboración en un espíritu de unidad y comunidad entre los diferentes componentes educativos es, pues, esencial y debe ser alentada y alimentada. La escuela puede y debe actuar como catalizador, para ser un lugar de encuentro y de convergencia de toda la comunidad educativa con el único objetivo de formar, ayudar a crecer como personas maduras, simples, honestas y competentes, que sepan amar con lealtad, que sepan vivir la vida como una respuesta a la vocación de Dios, y la futura profesión como un servicio a la sociedad.
Al final de su discurso el Santo Padre saluda a la delegación del Colegio jesuita albanés de Scutari, que después de largos años de represión de las instituciones religiosas, a partir de 1994 reanudó sus actividades, acogiendo y educando a jóvenes católicos, ortodoxos, musulmanes, e incluso algunos alumnos nacidos en contextos familiares agnósticos. “Así la escuela -escribe el Papa- se convierte en un lugar de diálogo y de confrontación pacífica, para promover actitudes de respeto, escucha, amistad y espíritu de cooperación”.
ER RV


Traducción integral del texto del discurso escrito en italiano por el Papa
Queridos chicos, queridos jóvenes!
Estoy encantado de recibirles con sus familias, los educadores y los amigos de la gran familia de las Escuelas de los Jesuitas italianos y de Albania. A todos vosotros, dirijo mi afectuoso saludo: ¡bienvenidos! Con todos ustedes me siento verdaderamente "en familia". Y es una alegría especial la coincidencia de nuestro encuentro con la solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús.
Déjenme decirles una cosa en primer lugar que se refiere a San Ignacio de Loyola, nuestro fundador. En el otoño de 1537, yendo a Roma con un grupo de sus primeros compañeros se preguntaron:¿si nos piden quiénes somos, que responderemos? La respuesta fue espontánea: "Diremos que somos la "Compañía de Jesús" (Fontes Narrativa Societatis Iesu, vol 1, p 320-322). Un nombre comprometido, que quería indicar una relación muy estrecha de amistad, de total afecto por Jesús, al que querían seguir sus pasos. ¿Por qué os menciono este hecho? Porque San Ignacio y sus compañeros habían comprendido que Jesús les enseñó cómo vivir bien, cómo dar un sentido profundo a nuestra existencia, que dé entusiasmo, que dé alegría y esperanza; habían entendido que Jesús es un gran maestro de vida y un modelo de vida, y que no sólo les enseñaba, sino que les invitaba a seguirlo por este camino.
Queridos chicos, si ahora les hiciera la pregunta: ¿por qué van a la escuela, qué me contestarían? Probablemente habría muchas respuestas dependiendo de la sensibilidad de cada uno. Pero creo que se podría resumir todo diciendo que la escuela es uno de los ambientes educativos en los que crecemos para aprender a vivir, para ser hombres y mujeres adultos y maduros, capaces de caminar, de recorrer el camino de la vida. ¿Cómo os les ayuda a crecer su escuela? Les ayuda no sólo desarrollar su inteligencia, sino a tener una formación integral de todos los componentes de su personalidad.
Siguiendo lo que nos enseña San Ignacio, en la escuela el elemento principal es aprender a ser magnánimo. La magnanimidad: esta virtud del grande y del pequeño (no coerceri maximo contineri mínimo Divinum este), que nos hace siempre mirar hacia el horizonte. ¿Qué quiere decir ser magnánimo? Significa tener un gran corazón, tener un alma grande, quiere decir tener grandes ideales, el deseo de lograr grandes cosas en respuesta a lo que Dios pide de nosotros, y para ello hacer las cosas bien todos los días, todas las acciones cotidianas, los compromisos, los encuentros con la gente; hacer las pequeñas cosas de todos los días con un gran corazón abierto a Dios y a los demás. Es importante pues cuidar la formación humana destinada a la magnanimidad.
La escuela no sólo les amplía su dimensión intelectual, sino también humana. Y creo que, en especial, los colegios de los Jesuitas cuidan con esmero las virtudes humanas: la lealtad, el respeto, la fidelidad, el compromiso. Me gustaría hacer hincapié en dos valores fundamentales: la libertad y el servicio. Sobre todo: ¡sean personas libres! ¿Qué quiero decir con ello? Tal vez piensan que la libertad es hacer todo lo que se desea, o aventurarse en experiencias-límite para experimentar la emoción y vencer el aburrimiento. Esto no es libertad. Libertad significa saber reflexionar sobre lo que hacemos, saber valorar lo que es bueno y lo que es malo, cuáles son los comportamientos que hacen crecer, significa elegir siempre el bien. Nosotros somos libres para el bien. ¡Y en eso, no tengan miedo de ir contracorriente, aunque no sea fácil! Ser libres de escoger siempre el bien es un reto, pero les hará personas rectas, que saben enfrentar la vida, personas con valentía y paciencia (parresía y ypomoné). La segunda palabra es el servicio. En sus escuelas ustedes participan en diversas actividades que les llevan a no encerrarse en uno mismo o en su pequeño mundo, sino a abrirse a los demás, especialmente a los pobres y necesitados, a trabajar para mejorar el mundo en que vivimos. Sean hombres y mujeres con los demás y para los demás, verdaderos campeones en el servicio a los demás.
Para ser magnánimos con libertad interior y espíritu de servicio se requiere la formación espiritual. ¡Queridos chicos, queridos jóvenes, amen cada vez más a Jesucristo! Nuestra vida es una respuesta a su llamada y ustedes serán felices y construirán bien su vida si saben responder a esa llamada. Sientan la presencia del Señor en su vida. Él está cerca de cada uno de ustedes como compañero, como amigo, que les ayuda comprender, que les alienta en los momentos difíciles y nunca les abandona. En la oración, en el diálogo con Él, en la lectura de la Biblia, descubrirán que Él está realmente cerca. Y aprendan también a leer los signos de Dios en su vida. Él siempre nos habla, incluso a través de los hechos de nuestro tiempo y de nuestra existencia cotidiana: a nosotros nos corresponde escucharlo.
No quiero ser demasiado prolijo, pero una palabra específica quisiera dirigirla también a los educadores: los jesuitas, los maestros, los padres. ¡No se desanimen ante las dificultades que presenta el desafío educativo! Educar no es una profesión, sino una actitud, una forma de ser; para educar es necesario salir de sí mismos y estar entre los jóvenes, para acompañarlos en las etapas de crecimiento, estando a su lado. “Denles a los jóvenes esperanza, optimismo para afrontar su camino en el mundo. Enséñenles a ver la belleza y la bondad de la creación y del hombre, que siempre conserva la huella del Creador. Pero sobre todo den testimonio con su vida de lo que les comunican. Un educador - Jesuita, profesor, operador, padre - transmite conocimientos, valores con sus palabras, pero va a ser determinante con los niños si acompaña sus palabras con su testimonio con su vida coherente. ¡Sin coherencia no es posible educar! Todos ustedes son educadores, no pueden delegar competencias en esta materia. La colaboración en un espíritu de unidad y comunidad entre los diferentes componentes educativos es, pues, esencial y debe ser alentada y alimentada. La escuela puede y debe actuar como catalizador, para ser un lugar de encuentro y de convergencia de toda la comunidad educativa con el único objetivo de formar, ayudar a crecer como personas maduras, simples, honestas y competentes, que sepan amar con lealtad, que sepan vivir la vida como una respuesta a la vocación de Dios, y la futura profesión como un servicio a la sociedad.
A los Jesuitas quisiera añadirles que es importante fomentar su participación en el campo educativo. Las escuelas son una herramienta valiosa para dar una contribución al camino de la Iglesia y de toda la sociedad. El campo de la educación no se limita a la escuela convencional. Anímense a buscar nuevas formas de educación no convencionales, según "las necesidades del lugar, tiempo y de las personas."
Por último, un saludo a todos los ex-alumnos presentes, a los representantes de las escuelas italianas de la Red de Fe y Alegría, que conozco bien por el gran trabajo que hace en América del Sur, sobre todo entre las clases más pobres.
Y un saludo particular va a la delegación del Colegio albanés de Scutari, que después de largos años de represión de las instituciones religiosas, a partir de 1994 reanudó sus actividades, acogiendo y educando a jóvenes católicos, ortodoxos, musulmanes, e incluso algunos alumnos nacidos en contextos familiares agnósticos. Así la escuela se convierte en un lugar de diálogo y de confrontación pacífica, para promover actitudes de respeto, escucha, amistad y espíritu de cooperación”.
Queridos amigos, gracias a todos por este encuentro. Los encomiendo a la intercesión maternal de María y los acompaño con mi bendición: El Señor siempre está cerca de ustedes, les levanta de las caídas y les empuja a crecer y a tomar decisiones cada vez más altas "con gran ánimo y liberalidad" con magnanimidad.

Ad Maiorem Dei Gloriam. (Para mayor gloria de Dios).
Traducción de Eduardo Rubió
From Radio Vaticana
 
 
 
 
Divertido y tierno encuentro entre el Papa y miles de niños de colegios jesuitas

 
Publicado el 07/06/2013 por http://es.romereports.com
El aula Pablo VI se llenó de niños y jóvenes de colegios jesuitas, que se reunieron con el Papa Francisco.

Le recibieron con cantos, coros y aplausos y le preguntaron lo que más les preocupaba. Fue un encuentro muy distendido en el que el Papa les contestó con gran espontaneidad.

 
AÑO DE LA FE
 

jueves, 6 de junio de 2013

07.06 Sagrado Corazon de Jesus- 2013



En el mes dedicado al Sagrado Corazón de Jesús veamos las publicaciones sobre esta hermosa y muy difundida devoción centrada en el Amor de Dios, para que todos podamos conocerla y profundizar en ella:





















Las promesas del Sagrado Corazón de Jesús - 5º Promesa


Las promesas del Sagrado Corazón de Jesús - 6º Promesa


Las promesas del Sagrado Corazón de Jesús - 7º Promesa


Las promesas del Sagrado Corazón de Jesús - 8º Promesa   


Las promesas del Sagrado Corazón de Jesús - 9º Promesa 


Las promesas del Sagrado Corazón de Jesús - 10º Promesa


Las promesas del Sagrado Corazón de Jesús - 11° Promesa


Las promesas del Sagrado Corazón de Jesús - 12° Promesa  



Catequesis - Consagración de los jóvenes al Sagrado Corazón de Jesús


 
 
Vea a través de:
http://formacionpastoralparalaicos.blogspot.com/

Celebraciones en Honor al Sagrado Corazón de Jesús - Parroquia de San Pedro - Lima 2013

 
Programa 2013 de Celebraciones en Honor al Sagrado Corazón de Jesús - Parroquia de San Pedro -
Santuario Arquidiocesano del Sagrado Corazón de Jesús
 
QUINARIO DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS
PROGRAMA
 
LUNES 3 DE JUNIO
7.30 PM – Misa por el Papa Francisco y sus intenciones
MARTES 4 DE JUNIO
7.30 PM – Misa por los miembros del Apostolado de la Oración en el Perú
MIÉRCOLES 5 DE JUNIO
7.30 PM – Misa por los movimientos y grupos de laicos de la Parroquia
JUEVES 6 DE JUNIO
7.30 PM – Misa por las vocaciones sacerdotales en el Perú
VIERNES 7 DE JUNIO
8.00 AM – Misa
8.30 AM – Exposición del Santísimo
12.00 M – Misa
6.00 PM – Misa
..6.30 PM – Hora Santa
..7.30 PM – MISA SOLEMNE
por los peregrinos al Santuario Arquidiocesano del Sagrado Corazón de Jesús
...
Información proporcionada por el P. Enrique Rodríguez, S.J.

http://formacionpastoralparalaicos.blogspot.com/2013/05/programa-2013-de-celebraciones-en-honor.HTML


 
AÑO DE LA FE


VIDEO DE LA PROCESIÓN DE LA VIRGEN DE LOS DESAMPARADOS

Jueves, 6 de junio de 2013
VIDEO DE LA PROCESIÓN DE LA VIRGEN DE LOS DESAMPARADOS
Tenemos el vídeo de la Procesión de la Virgen de los Desamparados del Barrio que emitió Canal 9, gracias a nuestros amigos "Campaners Barri De Quart de Valencia":

Festa de la Mare de Deu dels Desamparats, Nazaret 2013 - Valencia
Campaners Barri de Quart de Valencia ·
Publicado el 31/05/2013
El dia 26 de Maig de 2013, ix en Solemne Processo la Mare de Deu dels Desamparats, la Patrona dels Valencians. Desde la Parroquia Ntra. Sra. dels Desamparats de Nazaret, recorreguent tot el barri.

Himno a la Virgen de los Desamparados, de valencia letra
Publicado el 06/06/2013
Homenaje a la Madre de los Desamparados

Texto en Valenciano
La patria valenciana s´ampara baix ton mant, ¡Oh, Verge Sobirana de terres de Llevant". La terra llevantina reviu en ta Capella el fervorós homenatje de pur i ver amor. puix sou la nostra Regina i vostra imatge bella pareix qu´está envoltada de mágic resplandor. La rosa perfumada, la mística assutzena, lo seu verger formaren als peus de ton altar. i fervorós en elles, lo valenciá t´ofrena la devoció mes santa que es puga professar. En terres valencianes la fe per Vos no mor i vostra Imatge Santa portem sempre en lo cor. Salve, Regina del cel i la terra; Salve, Verge dels Desamparats; Salve, sempre adorada Patrona; Salve, Mare del bons valencians

Texto en Castellano
La patria Valenciana se ampara bajo tu manto ¡Oh Virgen soberana de tierras de Levante!" La tierra Levantina revive en tu capilla al fervoroso homenaje de puro y verdadero amor. pues sois nuestra Reyna y vuestra imagen bella parece que está rodeada de mágico resplandor. La rosa perfumada, la mística azucena su vergel formaron a los pies de tu altar y fervoroso en ellas, el valenciano te ofrenda la devoción mas santa que se pueda profesar. En tierras Valencianas La fé por Vos no muere y Vuestra imagen Santa llevamos siempre en el corazón. Salve, Reyna del cielo y la tierra Salve, Virgen de los Desamparados Salve, siempre adorada patrona Salve, Madre de los buenos Valencianos.
 
2012 - AÑO DE LA FE - 2013

miércoles, 5 de junio de 2013

"Un solo Señor, una sola fe"


(RV).- La tarde del domingo 02 de junio a las cinco, hora de Roma, convocada por el Papa Francisco, la Iglesia Universal se detuvo simultáneamente en adoración Eucarística, con el lema “Un solo Señor, una sola fe”.


03 de junio, 2013. (Romereports.com)
Eran las cinco de la tarde en Roma. Un rayo de luz se filtraba desde la cúpula de la Basílica de San Pedro y caía sobre el altar de la confesión. La Iglesia católica vivió un acontecimiento único. En muchos lugares se festejaba el Corpus Christi y el Vaticano organizó para este Año de la Fe una Adoración Eucarística mundial y simultánea.

 

Emitido y Publicado el 02/06/2013 KTOTV
Adoration eucharistique en direct de Rome, avec le Pape François. Au même moment et pour la première fois, des adorations eucharistiques auront lieu dans le monde entier, de Tokyo à Honolulu en passant par Auckland, Paris et Lima
 
AÑO DE LA FE

Papa Juan XXIII ( *1881- +1963)

 
Papa Giovanni XXIII
(1881 - 1963)
Cittá del Vaticano
 
 
 
El Papa recuerda el 50 aniversario de la muerte de Juan XXIII  
Publicado el 04/06/2013http://es.romereports.com
El Papa visitó la tumba de Juan XXIII el día en que se cumplen 50 años de su fallecimiento. Antes saludó a miles de peregrinos de la diócesis de Bérgamo, de donde procede el Papa Juan XXIII, que acudieron a una Misa en la basílica de San Pedro. El Papa Francisco rezó con ellos y les pidió que procuren imitar a su predecesor. Destacó de él dos virtudes, la paz y la obediencia.
 

El Papa visita tumba de Juan XXIII para recordar 50 aniversario de su fallecimiento
Publicado el 03/06/2013 http://es.romereports.com
El Papa Francisco rezó unos minutos ante la tumba del Papa Juan XXIII, beatificado por Juan Pablo II en el año 2000. Hoy se cumplen 50 años del fallecimiento del "Papa bueno", autor de la encíclica "Pacem in Terris" y principal impulsor del Concilio Vaticano II.

This year marks the 50th anniversary of the death of John XXIII, the 'good Pope'
Publicado el 02/06/2013 http://en.romereports.com
2013 marks 50 years since the death of Pope John XXIII, who summoned the Second Vatican Council. Angelo Giuseppe Roncalli was born in Sotto il Monte, a small village in the province of Bergamo, northern Italy, in 1881.


AÑO DELLA FEDE