SEMANA SANTA 2010 EN QUITO ECUADOR
Calendario litúrgico Semana Santa - 28 de marzo al 4 de abril
Domingo de Ramos, 28 de marzo
08h30 El Sagrario: Bendición de ramos y procesión hasta la Catedral.
08h45 Catedral: Misa Pontifical, presidida por el Arzobispo de Quito.
09h00 Basílica del Voto Nacional: Inicio de Procesión hasta plaza de San Francisco. Acompaña el Ballet Folclórico Jacchigua. Concentración en la Basílica. Recorrido: Basílica, Venezuela, Manabí, García Moreno, Sucre, Benalcázar, Plaza San Francisco.
11h00 Plaza San Francisco: Misa Campal, se realizará la Eucaristía con bendición de Ramos.
18h00 Plaza del Teatro: Inicio de procesión hasta la plaza San Francisco donde se concentrara el Concierto de Campanarios. Acompaña el Ballet Folclórico Jacchigua.
20h00 Plaza San Francisco: Concierto de campanarios. En todos los campanarios del Centro Histórico.
Miércoles Santo, 31 de marzo
12h00 Catedral: Arrastre de las Caudas. Rezo comunitario de vísperas, reseña y bendición con la reliquia de la Verdadera Cruz.
Jueves santo, 1 de abril
08h30 Catedral: Misa Crismal Pontifical en Catedral de consagración de los óleos, presidida por el Señor Arzobispo de Quito y celebrada por sacerdotes representantes del Presbiterio arquidiocesano. Renovación de los compromisos sacerdotales. Pueden comulgar todos los fieles.
17h30 Catedral: Misa Pontifical de la cena del Señor. Institución de la Eucaristía. Lavatorio de los pies y procesión con el Santísimo Sacramento al Monumento.
20h00 Iglesias del Centro Histórico: Hora Santa - Adoración del Santísimo en monumentos, recorrido por 7 Iglesias. (ver mapa recorrido 7 cruces)
Viernes Santo, 2 de abril
07h00 a 10h00 Convento San Francisco: Confesiones.
08h00 Templo de San Francisco: Rezo del vía crucis.
11h45 Atrio de San Francisco: Lectura de la sentencia a Jesucristo.
12h00 Plaza San Francisco: Inicia procesión penitencial “Jesús del gran poder”. Recorrido: Plaza San Francisco, Bolívar, Venezuela y hacia el norte, Manabí, Vargas, José Riofrío, Venezuela, Manabí, García Moreno, Sucre y Plaza San Francisco. (ver mapa de recorrido)
17h00 Templo de San Francisco: Liturgia de Viernes Santo.
17h30 Catedral: Solemne Acción litúrgica de la Pasión del Señor. Plegaria Universal. Adoración de la Santa Cruz y Comunión.
18h00 Iglesia de Santo Domingo: Sermón de las siete palabras. Inicio procesión del Silencio. Recorrido: Iglesia de Santo Domingo, Rocafuerte, Leopoldo Salvador, calle de los Milagros, Montufar, Pereira, Flores, Sucre, Garcia Moreno, Rocafuerte, plaza e iglesia de Santo Domingo. (Ver mapa de recorrido)
Sábado Santo, 3 de abril
15h00 San Francisco: Liturgia de la Soledad de María.
19h00 San Francisco: Solemne Vigilia Pascual bendición del fuego. Iluminación del cirio pascual, pregón pascual, liturgia, bendición del agua, liturgia eucarística.
19h30 Catedral: Vigilia Pascual. Bendición del fuego nuevo. Liturgia de la Palabra. Liturgia bautismal. Liturgia de la Eucaristía. concelebrada por los miembros del Cabildo Primario.
Domingo Santo, 4 de abril
18h00 Catedral: Solemne Misa Pontifical de la resurrección del seño. Presidida por el Arzobispo.
Miércoles Santo, el Arrastre de las Caudas (31 marzo 2010) El Arrastre de Caudas es una de las ceremonias más relevantes, que se celebra sólo en dos lugares del mundo: Quito y Sevilla en España. Se trata de una tradición heredada del Imperio Romano, en la que el ejército rinde homenaje a un general caído en batalla. En esta ceremonia se cubría el cuerpo del general con un manto negro, y luego este manto se deslizaba por sobre todos los soldados, vestidos también de luto. Al pasar el manto del general sobre toda la tropa, se buscaba traspasar a los soldados el espíritu de fuerza y valentía del general muerto.
La Iglesia Católica hace lo mismo en honor a Jesús; en una procesión dentro de la Iglesia, el arzobispo transporta al Santísimo, una joya de oro y piedras preciosas que lleva incrustadas fragmentos de la Verdadera Cruz de Cristo. Los canónigos visten la sotana, una capa negra y la capucha de la que se desprende la cauda, una tela negra de varios metros de largo que cae por sus espaldas y se arrastra por el suelo. Luego, bate sobre los canónigos postrados frente al altar mayor una gran bandera negra con una cruz roja en el centro, para pasar a los religiosos “la energía, los méritos y el espíritu” del Salvador.
Este día recuerda la jornada en que se realizó la Última Cena; en la mayoría de iglesias de la ciudad inicia con el rezo del Vía Crucis. Sin embargo, es solamente en la Catedral de Quito en la que se realiza la Misa Crismal; una misa oficiada por el arzobispo o el obispo, en la que participan todos los sacerdotes, quienes a través de esta ceremonia renuevan las promesas sacerdotales, además, se bendicen los óleos para los catecúmenos y los enfermos, y el aceite para el bautismo y la confirmación.
Para comprender la importancia de la Misa Crismal hay que recordar lo que sucedió el Jueves Santo. Día en que Jesucristo reunió a sus discípulos y lavó sus pies en signo de humildad. Jesús se retiró su manto, símbolo de maestro, se amarró una toalla a la cintura y se puso a lavar los pies de sus discípulos. Luego se cumple el rito propio de los judíos que era la Cena de Pascua en la que se conmemoraba la salida del pueblo judío de Egipto, durante esta cena se comía el cordero junto con una salsa blanca y hierbas amargas. La salsa blanca como recuerdo del mortero, la mezcla que sirvió para unir los ladrillos de Israel, y las hierbas amargas como memoria de los años de amargura y esclavitud del pueblo judío en Egipto. Se tomaba también dos copas de vino y pan ácimo (pan sin levadura) pues el pueblo en la apresurada salida de Egipto, no tuvo tiempo para hacer leudar el pan.
En la Última Cena, Jesucristo tomó el pan ácimo y la copa de vino e instituyó la Nueva Alianza: en la que Jesús es el cordero pascual. Entonces tomó el pan, lo bendijo, lo partió y lo entregó a los discípulos diciendo “este es mi cuerpo que será entregado por ustedes”. La copa de vino es el cáliz de la Nueva y Eterna Alianza “que será derramada por ustedes y por todos para el perdón de los pecados”, es aquí cuando se instituye la Eucaristía o Santa Comunión, que es la parte principal del servicio religioso en el catolicismo cuando se recuerda la transformación del cuerpo y la sangre de Cristo en el pan y el vino y el paso de Jesucristo hacia el Padre.
Jueves Santo, la Misa Crismal, Jesús lava los pies a sus discípulos, la Última Cena (1 de abril 2010) Para recibir la comunión y recibir así a Jesucristo, se realizan misas a lo largo de la tarde del jueves, luego se visita los siete monumentos, es decir las iglesias, para recordar los pasos en que Cristo fue ajusticiado en su ir de Herodes a Pilatos. Para erigirse como monumentos, las iglesias adornan sus altares con telas, damascos, platería, se coloca un tabernáculo y en su centro el copón con las hostias como recuerdo de que Jesús ha sido tomado preso. Tras la misa de las seis mueren las campanas y ya no repicarán más sino hasta el Sábado Santo por la noche durante la Vigilia Pascual en honor a Cristo. En el Centro Histórico 40 iglesias exhibirán sus altares en sus mejores galas en la noche del Jueves Santo.
Las palabras del fallecido papa Juan Pablo II, en el Jueves Santo del año 2002 aclaran aún más la dimensión de esta jornada de recordación para la religión católica: “El Maestro Divino nos ha encomendado, en la Eucaristía, la celebración de su sacrificio, llamándonos así a su especial seguimiento. Por eso, a lo largo de esta celebración, le reafirmamos todos juntos nuestra fidelidad y nuestro amor, y, confiando en el poder de su gracia, renovamos las promesas que hicimos el día de nuestra ordenación... ¡Qué grande es para nosotros este día! El Jueves Santo, Jesús nos convirtió en ministros de su presencia sacramental entre los hombres. Puso en nuestras manos su perdón y su misericordia, y nos hizo el regalo de su sacerdocio para siempre.”
Viernes Santo, condena y muerte de Jesucristo (2 de abril 2010)Tras el rezo del Vía Crucis en la mañana, la comunidad religiosa de Quito forma parte de la impresionante procesión de Viernes Santo que parte de San Francisco. Se estima que en los últimos años alrededor de 90 mil personas han participado en esta procesión, sin contar con los miles de espectadores que desbordan el Centro Histórico.
La procesión empieza a las 12 del día en recuerdo de la hora en la que Poncio Pilatos condenó a muerte a Jesús. Los cucuruchos, junto con las Verónicas, son las figuras tradicionales que acompañan a Jesús del Gran Poder y a la Virgen Dolorosa.
Los cucuruchos simbolizan a los penitentes que, vestidos con túnicas moradas y bonetes altos en forma de cono, muestran su arrepentimiento y su voluntad de cambio. Las Verónicas son las mujeres que recuerdan a aquella que se acercó a Jesús mientras iba al Calvario y le limpió el rostro cubierto de sudor y sangre y en cuyo lienzo habría quedado impregnado el rostro de Jesucristo. En Quito, las Verónicas también visten de morado y llevan el rostro cubierto con un velo negro.
El recorrido inicia en San Francisco, y termina este mismo lugar a las tres de la tarde, la hora de la muerte del Señor, y el descendimiento se realiza a las seis de la tarde, hora en que termina el día para los judíos.
En muchas iglesias existe la ceremonia de las Siete Palabras y la impresionante ceremonia del descendimiento en la que el sacerdote, desde el púlpito, narra cómo las santas mujeres y un grupo de Apóstoles se encargaron de dar sepultura a Jesús. Durante la narración, los monaguillos quitan los clavos de la imagen de Cristo crucificado y depositan su cuerpo en manos de mujeres vestidas con túnicas y luego en un cofre adornado de flores y rasos blancos. Tras el descendimiento inicia la procesión con el cristo difunto llevado por los Santos Varones, hombres que llevan un turbante blanco en la cabeza, las albas.