VALENCIA, El arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro, ha agradecido hoy a Dios la "gracia inmensa de ser pastor de esta Iglesia en Valencia, que guarda como un tesoro la reliquia original y única del Santo Cáliz, la copa con la que Nuestro Señor Jesucristo celebró la Última Cena, y que nos remite permanentemente al centro mismo y culmen de la vida cristiana que es la Eucaristía".
Durante la homilía en la misa que ha presidido esta tarde en la Catedral de Valencia, con motivo de la fiesta anual del Santo Cáliz, monseñor Osoro ha invitado a todas las comunidades parroquiales de la diócesis, como "compromiso especial de la Iglesia en Valencia" por custodiar esta reliquia, a fomentar la creación en cada parroquia de "un grupo, asociación o movimiento eucarístico que se dedique a la adoración de la Eucaristía". "Aquí es donde adquiere sentido, quizás, el que se os dé una copia del Santo Cáliz", ha señalado el prelado, que ha entregado luego siete réplicas del Santo Grial a otras tantas parroquias que han concluido su restauración en los últimos meses.
La ceremonia, que ha sido la primera fiesta del Santo Cáliz presidida por monseñor Osoro como arzobispo de Valencia, ha dado comienzo con el traslado en procesión por el interior de la Seo del Santo Cáliz desde su capilla de la Catedral donde se conserva hasta el altar mayor.
A continuación, el prelado ha presidido la eucaristía y después de la homilía, ha bendecido y entregado las réplicas que son regaladas cada año “a aquellas parroquias que han destacado bien por haber restaurado sus templos o por haber celebrado algún aniversario especial", según ha indicado a la agencia AVAN el presidente de la Cofradía del Santo Cáliz de Valencia, Antonio Rossi.
Finalmente, el Santo Grial ha sido devuelto de nuevo en procesión a su capilla de la Catedral. Igualmente, en la ceremonia han participado las dos parroquias de Alberic, donde se ha erigido recientemente una cofradía de Semana Santa dedicada al Santo Cáliz. La procesión de entrada ha sido encabezada por la Cruz-Guía de esta asociación, que fue bendecida el pasado día 25 por el obispo auxiliar de Valencia monseñor Esteban Escudero.
Precisamente, monseñor Osoro decidió incluir en su escudo episcopal la imagen del Santo Cáliz el pasado 8 de enero, el mismo día en que se hizo público su nombramiento como arzobispo de Valencia por el Papa, como “símbolo de afecto a la Iglesia de Valencia y recordatorio de la Eucaristía”, según informaron entonces a la agencia AVAN fuentes del Arzobispado.
La cofradía del Santo Cáliz, a la que pertenecen en la actualidad cerca de 3.000 cofrades, fue creada con el fin de promover y fomentar el culto al Santo Grial que, según la tradición, empleó Jesucristo en la Última Cena, y que se venera en la Catedral de Valencia desde el siglo XV.
TEMPLOS QUE RECIBEN LA RÉPLICA DEL SANTO CÁLIZ
Un total de siete parroquias de la diócesis de Valencia han recibido una réplica del Santo Cáliz, durante la ceremonia que ha presidido el prelado: Santa Rosa de Lima, de Valencia, San Luis Obispo, de Valencia; San Juan Bautista y la parroquia de La Encarnación, ambas de Alzira; Santa Ana, de Bellús; Nuestra Señora del Don, de Alfafar; y los Santos Juanes, de Faura.