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jueves, 19 de agosto de 2010

19.08 Madre Teresa de la Cruz Candamo Álvarez Calderón


Biografía de Madre Teresa De La Cruz Candamo

Nació en Lima en la calle de la Coca, el 19 de Agosto de 1,875.
Fueron sus padres don Manuel Candamo y doña Teresa Alvarez Calderón.
Fue bautizada el 27 de Agosto del mismo año, siendo sus padrinos dos hermanos de su madre: Nicanor y María Rosa Alvarez Calderón, Hermana de la Caridad y fundadora del hospital de Tarma. Teresa fue educada en un hogar profundamente católico y virtuoso. Desde temprana edad mostró una vivacidad especial y un corazón muy sensible y compasivo. Desde su infancia mostraba sus habilidades artísticas y su afición a la lectura. Recibió su primera educación con profesoras particulares en su casa, pasando posteriormente como interna al San Pedro, de las religiosas del Colegio del Sagrado Corazón.
Dominaba el francés y el inglés, destacando también por sus cualidades musicales, por su hermosa voz, así como por sus excelentes trabajos literarios. Tuvo especial devoción a la Santísima Virgen y se consagró como Hija de María. Culminó sus estudios escolares el año 1,892.
En 1,903 su padre fue elegido Presidente de la República por lo que la vida social discreta que Teresa llevaba anteriormente se volvió mucho más activa, acorde al rango de su familia. A los pocos meses de actividad presidencial el señor Candamo, falleció en Arequipa. Este hecho afectó muchísimo a Teresa y a los suyos. Pasado el duelo, la familia decidió hacer un viaje a Europa.
El Descubrimiento de su Pasión
La visita a S.S. Pío X, y el contacto con los lugares sagrados en Roma, despierta en Teresa un fuerte deseo de entrega al servicio eclesial. Como ella misma lo dice: “esta visita aclaró, como era de esperarse, la idea de la vocación de mi alma. Se despertó en mí un gran deseo de servir a la Santa Iglesia en algo que estuviera a mi alcance”.
Así, son varios los elementos a través de los cuales Teresa va vislumbrando el proyecto de amor de Dios que le sugiere una nueva y peculiar orientación de su vida. Sin embargo, prescindiendo de otros acontecimientos, no menos importantes, se puede decir con certeza que es en Alassio, pequeño pueblo al nor-oeste de Italia donde, en el año 1906, encontrándose en oración ante el Crucifijo que luce en el altar mayor de la colegiata de ese lugar, Teresa recibe la llamada mística de la Cruz, como ella misma lo refiere: «Comprendí al mirarlo que me decía: “Si buscas ideal, aquí tienes; si quieres Amor, aquí tienes; si quieres Modelo, aquí tienes”. No quiero decir que oyera palabras. Solamente los conceptos o sentido de estas palabras se me clavaron en la inteligencia, causándome mucho temor, porque comprendí toda la amplitud de su sentido y todo un programa de austeridad para el cual estaba muy poco preparada y tanto más austero cuanto que comprendí que allí estaba simbolizada mi verdadera vocación».
Teresa comparte todas estas intuiciones y anhelos con su hermana María, su confidente inseparable, quien se siente igualmente atraída por el Señor. Poco a poco la llamada de Dios se va haciendo más clara y precisa orientándose a la fundación de una nueva Congregación Religiosa en la iglesia y que llegado el momento, Teresa funda bajo el título y espíritu de la Cruz, siguiendo esta inspiración recibida del Crucificado, en Alassio.
Realización del proyecto Vocacional y Apostólico
El proyecto vocacional que Teresa ha intuido en Europa, lo concretiza progresivamente a su retorno al Perú: Teresa intensifica su vida contemplativa y, al mismo tiempo comienza a dedicarse con gran celo a obras de apostolado, sobretodo a la Catequesis, labor que empieza a desarrollar, juntamente con su hermana María, en la Parroquia del Sagrario de Lima.
Entre tanto se iban uniendo a Teresa y a María algunas jóvenes que compartían con entusiasmo los mismos ideales y trabajos apostólicos y a quienes Teresa iba exponiendo las inspiraciones divinas que recibía y que ella escribe en «La Obra de la Cruz», primeras Constituciones y actual Regla de la Congregación. En la sociedad limeña se había comenzado una campaña directa y sin tregua contra todo el grupo.
En este período de persecución, Teresa tuvo la iluminación divina sobre el espíritu de la futura Obra y el camino para alcanzar la santificación: la sencillez, como expresión de una fuerte espiritualidad de la Cruz y que abarca todo un programa de vida intensamente contemplativa y fuertemente apostólica, sintetizado en Liturgia y Catequesis, bajo el lema: «Omnia in Christo».
Así transcurren los años buscando realizar su camino de fe en la escuela del abandono a la voluntad divina, hasta que, después de largas y penosas gestiones ante las autoridades eclesiásticas, Teresa recibe, el 24 de febrero de 1,919, el anhelado permiso oficial, concedido el 17 de diciembre de 1,918 por S.S. Benedicto XV, para la fundación de la Congregación; hecho que se realiza en la Solemnidad de la Exaltación de la Santa Cruz, el 14 de septiembre de 1,919, en el Rímac en la Quinta Villacampa.
Canonesas de la Cruz - Extensión de la Obra
La vida comunitaria y acción apostólica de la Congregación de Canonesas de la Cruz, iniciada en Villacampa, desde donde Teresa y sus religiosas salen a catequizar a los más pobres y necesitados, continúa después en el Convento del Prado, al lado de las “Cinco Esquinas”; más tarde en la Casa de Ejercicios de San Pedro, de larga tradición virreinal, hasta que aquí en José Díaz se construyó definitivamente la Casa-Madre.
En este itinerario se afirmaron las raíces de la Congregación sostenida en la oración, aumentó el número de religiosas, se fueron fundando nuevas casas y multiplicándose las obras de Catequesis y Liturgia, prioritariamente en las parroquias. Otros campos de apostolado son: Obra de protección a la Joven, Centros Educativos, Casas Hogar de niños y ancianos, Pastoral Carcelaria y de la Salud, además de obras de servicio a la jerarquía eclesiástica. Las religiosas comparten este ideal y esta misión con la “Asociación de la Cruz”, institución fundada igualmente por la Madre Teresa de la Cruz.
La Congregación se extiende actualmente en diversas ciudades de nuestro país, así como en Argentina, Chile, Venezuela e Italia, buscando en todo la salvación de los hombres, anunciándoles el misterio de la Redención a través de la Catequesis y llevándolos a la vivencia de este misterio de la Cruz mediante la vida litúrgica.
Comunidades en el Perú: Piura, Chiclayo, Pimentel, Cajamarca, Paramonga, Chimbote, Huaraz, Lima (Pueblo Libre, Sta. Teresita, Chaclacayo, Los Angeles, Chacarilla, Monterrico), Chincha, Ica, Ayacucho, Cuzco, Huancavelica, Yurimagüas, Iquitos, Arequipa, Hunter, Tacna.

Comunidades en el extranjero:
Argentina (La Plata y San Pedro)
Venezuela
Chile (La Recoleta, Puente Alto y Ñuñoa)
Italia (Roma, Boffalora, Ternate y Brivio)
Proceso de beatificacion
El 29 de Abril de 1980 ha quedado marcado profundamente en el acontecer de nuestra historia, por ser la fecha en que se dio apertura al proceso de beatificación de la Sierva de Dios Teresa de la Cruz, que nos ha dejado una huella luminosa como mística del Calvario y apóstol incansable.
La Venerable Madre Teresa de la Cruz Candamo Álvarez Calderón es tía del sacerdote católico Jorge Álvarez Calderón Ayulo, párroco de San Marcos en el distrito de San Juan de Lurigancho (Diócesis de Chosica); y del notable historiador José Agustín de la Puente Candamo. Si desea visitar los restos de la Madre Teresa de la Cruz Candamo puede acercarse al Oratorio de Santa Teresita, ubicado en José Díaz 421 al costado del Estadio Nacional.

Oración para pedir favores a Dios por su intercesión y obtener así su glorificación
Señor Jesucristo, por los méritos de tu Cruz y por la gloria de tu santa Resurrección,
dígnate glorificar a tu Sierva Teresa de la Cruz -
mística del Calvario y apóstol incansable-
concediéndome las gracias que por su intercesión te suplico:
(se pide la gracia que se desea recibir).
Te pido también que a imitación suya aprenda a abandonarme confiadamente a la voluntad divina, afrontando con paz las diferentes pruebas de esta vida,
buscando identificarme plenamente contigo y hacer de mi vida una predicación constante y gozosa del misterio de la Cruz para mayor gloria tuya y bien de la Iglesia.
Así sea.

Sólo hay una salida para los sufrimientos…pasar por ellos,
Dios nunca te dará más de lo que puedes cargar
Así que carga tu cruz…
Aprendamos a cargar nuestra cruz sin renegar y sólo pidamos al Señor fuerza y fortaleza para salir adelante y triunfadores
Cualquiera sea tu cruz, cualquiera sea tu dolor,
siempre habrá un resplandor, un atardecer, después de la lluvia…
Quizás puedas tropezar, quizás hasta caer…
Pero Dios siempre está listo a responder a tu llamada…
Dios siempre enviará un arco iris después de la lluvia.

Fuente: http://canonesasdelacruz.edu.pe/