A pagina 253 del Graduale romano, VENI SANCTE SPIRITUS, Sequenza gregoriana di Pentecoste, Schola Gregoriana Mediolanensis, Direttore Giovanni Vianini, www.cantogregoriano.it
Veni Creator Spiritus - Marco Frisina
Video realizzato in occasione della Sede Vacante del 2013 per invocare lo Spirito Santo!! Il canto è di mons. Marco Frisina e tratto dalla raccolta "O Luce radiosa"
VENI CREATOR SPIRITUS - Giovanni Vianini
Il Veni Creator Spiritus, in italiano Vieni Spirito Creatore è un inno liturgico dedicato allo Spirito Santo ed attribuito a Rabano Mauro, arcivescovo di Magonza, del IX secolo.
Hymnus - Veni Creator Spiritus
Seminario Romano Maggiore, Festa della Madonna della Fiducia
8 febbraio 2013
“Dio su vida por Dios, la Iglesia y su pueblo” explica sobre Monseñor
Óscar Romero
Se incluye oración intersesora y ceremonia de beatificación
(RV).- El reconocido
teólogo y sacerdote peruano, Gustavo Gutiérrez confía en entrevista a Radio
Vaticano en español la importancia de la beatificación de monseñor Óscar
Arnulfo Romero, calificado por muchos como el “mártir de América”.
Además, el padre
Gustavo Gutiérrez recuerda a monseñor Romero – a quien conoció personalmente y
participó en su funeral – tras haber sido asesinado por un francotirador el 24
de marzo de 1980 mientras celebraba la Misa en
la capilla del hospital ‘La Divina Providencia’ en San Salvador.
Padre Gustavo Gutierrez
“En América Latina y
personas de Iglesia en particular estamos naturalmente muy contentos por la
beatificación. La esperábamos desde hace mucho tiempo y pronto seguramente la
canonización”.
“Yo creo que es un
testigo excepcional de muchas de las cosas que pasaron en América Latina, de
las dificultades que encontraban los que anunciaban el Evangelio, como él, y
creo también que su vida y la beatificación - y canonización posterior - va
aclarar muchas cosas de lo que llamamos en América Latina el “martirio
latinoamericano” porque son muchas las personas asesinadas por su compromiso
con los más pobres”.
Acerca del concepto del
‘martirio de los vivos’ que el Papa Francisco ha mencionado en diversas
ocasiones, el padre Gustavo Gutiérrez explica que “el martirio no es la única
manera de dar un testimonio del mensaje, personas que dan su vida” y precisa
una cuestión abordada en el documento de la V Conferencia general del CELAM en
Aparecida (Brasil).
“A mí me impresiona
mucho algo dicho por Aparecida que es sobre el martirio, recordando el martirio
de tantos, como he dicho, que han ofrecido - dice Aparecida - su vida por Dios,
por la Iglesia y por su pueblo”.
“Y ese añadido de ‘su
pueblo’ me parece muy importante, claro lo de Dios y la Iglesia es fundamental,
pero el añadido del pueblo, yo creo que dice mucho. Es en gran manera una
especie de extensión de las motivaciones del martirio, y así fue”.
“Yo conocí bien en
realidad a monseñor Romero, estuve en su funeral también y él, como cualquier
ser humano, como Jesús también, tenía miedo que lo matarán y lo decía, pero
también estaba convencido de que no podía abandonar a su pueblo”.
“Dios
concedió al Obispo mártir la capacidad de ver y oír el sufrimiento de su Pueblo”.
Sábado 23 mayo 2015
RV).- Con motivo de la
beatificación de Monseñor Óscar Arnulfo Romero Galdámez, el Papa Francisco
envió una Carta, este 23 de mayo, a Monseñor José Luis Escobar Alas Arzobispo
de San Salvador y Presidente de la Conferencia Episcopal de El Salvador.
Dirigiéndose a este
querido hermano, el Obispo de Roma se une a la alegría, en este día de fiesta
para la Nación salvadoreña, y también para los países hermanos
latinoamericanos, dando gracias a Dios porque concedió al Obispo mártir la
capacidad de ver y oír el sufrimiento de su pueblo, y fue moldeando su corazón
para que, en su nombre, lo orientara e iluminara, hasta hacer de su obrar un
ejercicio pleno de caridad cristiana.
El Santo Padre recuerda
que “en ese hermoso país centroamericano el Señor concedió a su Iglesia un
Obispo celoso que, amando a Dios y sirviendo a los hermanos, se convirtió en
imagen de Cristo Buen Pastor: quien en tiempos de difícil convivencia, supo
guiar, defender y proteger a su rebaño, permaneciendo fiel al Evangelio y en
comunión con toda la Iglesia”.
El Papa Bergoglio
también escribe que el ministerio del nuevo Beato “se distinguió por una
particular atención a los más pobres y marginados. Y en el momento de su
muerte, mientras celebraba el Santo Sacrificio del amor y de la reconciliación,
recibió la gracia de identificarse plenamente con Aquel que dio la vida por sus
ovejas”.
Francisco destaca
asimismo que la voz del nuevo Beato “sigue resonando hoy para recordarnos que
la Iglesia (…) es familia de Dios, en la que no puede haber ninguna división”.
Porque la fe en Jesucristo, “cuando se entiende bien y se asume hasta sus
últimas consecuencias genera comunidades artífices de paz y de solidaridad”. De
ahí que agregue que “a esto es a lo que está llamada hoy la Iglesia en El
Salvador, en América y en el mundo entero: a ser rica en misericordia, a
convertirse en levadura de reconciliación para la sociedad”.
“Monseñor Romero nos
invita a la cordura y a la reflexión, al respeto a la vida y a la concordia –
escribe el Santo Padre –. U añade
que “es necesario renunciar a la
violencia de la espada, a la del odio, y vivir la violencia del amor, la que
dejó a Cristo clavado en una cruz, la que se hace cada uno para vencer sus
egoísmos y para que no haya desigualdades tan crueles entre nosotros”.
Antes de concluir su
carta en la que pide al Presidente de la Conferencia Episcopal de El Salvador
que rece y haga rezar por él, el Papa destaca que el nuevo Beato “supo ver y
experimento en su propia carne el egoísmo que se esconde en quienes no quieren
ceder de lo suyo para que alcance a los demás”.
Y recuerda que es un
“momento favorable para una verdadera y propia reconciliación nacional ante los
desafíos que hoy se afrontan”. Por esta razón el Papa participa de sus
esperanzas, se une a sus oraciones para que florezca la semilla del martirio y
se afiancen por los verdaderos senderos a los hijos e hijas de esa nación, que
se precia de llevar el nombre del divino Salvador del mundo”.
(María Fernanda
Bernasconi - RV).
Texto de la Carta del
Santo Padre Francisco con motivo de la beatificación de Monseñor Óscar Arnulfo
Romero Galdámez
Excmo. Mons. José Luis
Escobar Alas
Arzobispo de San
Salvador
Presidente de la
Conferencia Episcopal de El Salvador
Querido Hermano: La
beatificación de monseñor Óscar Arnulfo Romero Galdámez, que fue Pastor de esa
querida Arquidiócesis, es motivo de gran alegría para los salvadoreños y para
cuantos gozamos con el ejemplo de los mejores hijos de la Iglesia. Monseñor
Romero, que construyó la paz con la fuerza del amor, dio testimonio de la fe
con su vida entregada hasta el extremo.
El Señor nunca abandona
a su pueblo en las dificultades, y se muestra siempre solícito con sus
necesidades. Él ve la opresión, oye los gritos de dolor de sus hijos, y acude
en su ayuda para librarlos de la opresión y llevarlos a una nueva tierra,
fértil y espaciosa, que “mana leche y miel” (cf. Ex 3, 7-8). Igual que un día
eligió a Moisés para que, en su nombre, guiara a su pueblo, sigue suscitando
pastores según su corazón, que apacienten con ciencia y prudencia su rebaño
(cf. Jer 3, 15).
En ese hermoso país
centroamericano, bañado por el Océano Pacífico, el Señor concedió a su Iglesia
un Obispo celoso que, amando a Dios y sirviendo a los hermanos, se convirtió en
imagen de Cristo Buen Pastor. En tiempos de difícil convivencia, Monseñor
Romero supo guiar, defender y proteger a su rebaño, permaneciendo fiel al
Evangelio y en comunión con toda la Iglesia. Su ministerio se distinguió por
una particular atención a los más pobres y marginados. Y en el momento de su
muerte, mientras celebraba el Santo Sacrificio del amor y de la reconciliación,
recibió la gracia de identificarse plenamente con Aquel que dio la vida por sus
ovejas.
En este día de fiesta
para la Nación salvadoreña, y también para los países hermanos
latinoamericanos, damos gracias a Dios porque concedió al Obispo mártir la
capacidad de ver y oír el sufrimiento de su pueblo, y fue moldeando su corazón
para que, en su nombre, lo orientara e iluminara, hasta hacer de su obrar un
ejercicio pleno de caridad cristiana.
La voz del nuevo Beato
sigue resonando hoy para recordarnos que la Iglesia, convocación de hermanos
entorno a su Señor, es familia de Dios, en la que no puede haber ninguna
división. La fe en Jesucristo, cuando se entiende bien y se asume hasta sus
últimas consecuencias genera comunidades artífices de paz y de solidaridad. A
esto es a lo que está llamada hoy la Iglesia en El Salvador, en América y en el
mundo entero: a ser rica en misericordia, a convertirse en levadura de
reconciliación para la sociedad.
Monseñor Romero nos
invita a la cordura y a la reflexión, al respeto a la vida y a la concordia. Es
necesario renunciar a “la violencia de la espada, la del odio”, y vivir “la
violencia del amor, la que dejó a Cristo clavado en una cruz, la que se hace
cada uno para vencer sus egoísmos y para que no haya desigualdades tan crueles
entre nosotros”.
Él supo ver y
experimentó en su propia carne “el egoísmo que se esconde en quienes no quieren
ceder de lo suyo para que alcance a los demás”. Y, con corazón de padre, se
preocupó de “las mayorías pobres”, pidiendo a los poderosos que convirtiesen
“las armas en hoces para el trabajo”.
Quienes tengan a
Monseñor Romero como amigo en la fe, quienes lo invoquen como protector e
intercesor, quienes admiren su figura, encuentren en él fuerza y ánimo para
construir el Reino de Dios, para comprometerse por un orden social más
equitativo y digno.
Es momento favorable
para una verdadera y propia reconciliación nacional ante los desafíos que hoy
se afrontan. El Papa participa de sus esperanzas, se une a sus oraciones para
que florezca la semilla del martirio y se afiancen por los verdaderos senderos
a los hijos e hijas de esa Nación, que se precia de llevar el nombre del divino
Salvador del mundo.
Querido hermano, te
pido, por favor, que reces y hagas rezar por mí, a la vez que imparto la
Bendición Apostólica a todos los que se unen de diversas maneras a la
celebración del nuevo Beato.
Fraternamente,
Francisco - Vaticano, 23 de mayo de 2015
MISA of Pentecostes - 2015.05.24
VATICAN
Programado para el 24 may. 2015
Starts at 10:00 am - Pope Francis presides at Holy Mass on the Solemnity of Pentecost
Regina Coeli - 2015.05.24
Programado para el 24 may. 2015
Starts at 12:00 pm - The Holy Father recites the Regina Coeli, which in the Easter Season and until the Pentecost replaces the Angelus, and then issues greetings to the faithful.
Finaliza Tiempo Pascual 2015
Ven Espíritu Santo
En
Pentecostés (ó Domingo de Pentecostés) se celebra el descenso del Espíritu
Santo y el inicio de la actividad de la Iglesia, por ello también se le conoce
como la celebración del Espíritu Santo.
Siete
semanas son cincuenta días, de ahí el nombre de “Pentecostés” (= cincuenta) que
recibió más tarde. La fiesta de Pentecostés es uno de los Domingos más importantes
del año, después de la Pascua. En el Antiguo Testamento era la fiesta de la
cosecha y, posteriormente, los israelitas, la unieron a la Alianza en el Monte
Sinaí, cincuenta días después de la salida de Egipto.
En el
calendario cristiano con Pentecostés termina el tiempo pascual de los 50 días.
Los cincuenta días pascuales y las fiestas de la Ascensión y Pentecostés,
forman una unidad. No son fiestas aisladas de acontecimientos ocurridos en el
tiempo, son parte de un solo y único misterio.
Aunque
durante mucho tiempo, debido a su importancia, esta fiesta fue llamada por el
pueblo segunda Pascua, la liturgia actual de la Iglesia, si bien la mantiene
como máxima solemnidad después de la festividad de Pascua, no pretende hacer un
paralelo entre ambas, muy por el contrario, busca formar una unidad en donde se
destaque Pentecostés como la conclusión de la cincuentena pascual. Vale decir
como una fiesta de plenitud y no de inicio.
La fiesta
de Pentecostés, es el segundo domingo más importante del año litúrgico en donde
los cristianos tienen la oportunidad de vivir intensamente la relación
existente entre la Resurrección de Cristo, su Ascensión y la venida del
Espíritu Santo.
Alternativas justas y
solidarias, ante la urgencia global del trabajo digno. Apremiante exhortación
del Papa
Inspiración cristiana y
dimensión popular, ante la cultura del descarte
(RV).- Ante la
precariedad del trabajo negro y del chantaje enlazado con la criminalidad,
sobre todo entre las jóvenes generaciones, el Papa hizo hincapié en que la
falta de trabajo quita la dignidad, impide la plenitud de la vida humana y
reclama una respuesta rápida y vigorosa para afrontar «el sistema económico
mundial, cuyo centro no es el hombre y la mujer, sino un ‘dios’, el ‘dios
dinero’, que es el que manda».
Con su cordial
bienvenida a unos siete mil miembros de las Asociaciones Cristianas de los
Trabajadores Italianos, que han peregrinado a Roma, con motivo del 70
aniversario de su fundación, el Papa Francisco los alentó a perseverar en su
importante compromiso y destacó la inspiración cristiana de estas asociaciones,
exhortando asimismo a profundizar en su
fidelidad a Jesucristo y la Palabra de Dios, estudiando y aplicando también la
Doctrina social de la Iglesia, ante los desafíos del mundo contemporáneo.
En particular, ante los
nuevos desafíos enlazados con el mundo laboral, que crean grandes desigualdades con amplitud y
velocidad inéditas, el Obispo de Roma señaló la urgente necesidad de proponer
alternativas justas y solidarias que se puedan practicar realmente.
El Papa Bergoglio
reiteró su exhortación a hacer que el ser humano exprese y acreciente la
dignidad de su propia vida, mediante el trabajo libre, creativo, participativo
y solidario. Sin olvidar el tema de la lucha contra la pobreza y el
empobrecimiento de la clase media.
Antes de su bendición,
el Santo Padre los invitó a rezar a la Virgen: «que es tan fiel a los pobres,
porque Ella era pobre».
Siga en directo la
beatificación del Monseñor Romero
2015-05-22 Radio
Vaticana
(RV).- A las diez de la
mañana hora de El Salvador, usted puede seguir en directo vía Radio online la
Beatificación de Monseñor Óscar Romero:
- En Radio Paz 88.5 FM
- En Radio María 107.3
FM
(from Vatican Radio)
Evento de Beatificación de Monseñor Romero
Subido por Cancilleria El Salvador el 23 mayo 2015
Pero quien era Oscar Arnulfo Romero ?
Nos lo hará saber, Federico
Hernández Aguilar, poeta, ex ministro de cultura, ex diputado y actual director
ejecutivo de la Cámara de Comercio de El Salvador en una entrevista para ACI
Prensa:
Según Hernández, cuando
comenzó a estudiar los documentos biográficos de Mons. Romero, se dio cuenta
que “yo no tenía un retrato sino una caricatura de Mons. Romero. Y eso creo que
es lo que le ha pasado durante los últimos 35 años a los salvadoreños”.
“Luego de su asesinato
(cuando celebraba Misa) en 1980, él comienza a ser muy manipulado, sobre todo
por la izquierda más radical del país, y eso también pesó en contra de su
imagen para muchos salvadoreños”, lamentó. “Somos hijos de una guerra civil que
polarizó el país y todavía lo mantiene bastante polarizado”, agregó.
1.- No era marxista
sino un convencido del Evangelio
Hernández Aguilar ha
estudiado el diario de Mons. Romero, sus cartas pastorales y los ocho tomos de
sus homilías en las que, aseguró, se puede encontrar “una dimensión integral
del personaje, las cosas que realmente decía”.
“Mons. Romero encarnaba
un llamamiento evangélico, encarnaba ese llamado que Jesús nos hacía de cuidar
a los pobres, velar por los demás, no encerrarnos en nuestro propio ombligo”.
Lamentablemente,
señaló, “hay gente que piensa que él solamente criticó la violencia de parte
del ejército, que por supuesto que la criticó y fue muy duro, pero también
criticó la violencia que en aquel momento comenzaba a hacer la guerrilla”.
Mons. Romero, aseguró
el experto, fue además “muy enfático, primero al decir que no estaba a favor
del marxismo, pero además que la violencia radicalizada por las ideas marxistas
no conducían a nada bueno”.
Mons. Romero era un
hombre de profunda oración y “fiel a la Iglesia Católica hasta el último día,
todo lo consultaba con el Magisterio” con una obediencia especial al Papa “a
quien él reconocía como Cristo en la tierra”.
2.- Tenía un especial
cariño por San Josemaría Escrivá y el Opus Dei
Hernández destacó
además el profundo afecto de Mons. Óscar Romero por la Prelatura Personal del Opus
Dei.
“Hay una relación, a lo
largo de toda su vida de Mons. Romero, de cariño por la Obra (Opus Dei)”,
destacó, y recordó que “se sabe de un encuentro que tuvo con el fundador del
Opus Dei, San Josemaría Escrivá, en Roma” que fue muy emotivo.
“En una ocasión cuando
ya Monseñor (Romero) era Obispo fue recibido en Roma por orden de San Josemaría
por gente de la Obra para que lo trataran bien, para que lo hicieran descansar,
y que estuviera tranquilo, porque lo veían nervioso, lo veían tenso por lo que
estaba ocurriendo en El Salvador”.
En 1975, tras la muerte
del fundador del Opus Dei, “uno de los primeros obispos del mundo que mandó
cartas al Papa pidiendo su beatificación fue precisamente Mons. Romero”.
“Luego, quien fue su
sucesor a cargo del Opus Dei, Mons. Álvaro del Portillo, ahora Beato también,
proclamado por el Papa Francisco, tuvieron una correspondencia muy afectuosa”,
señaló.
3.- Nunca dijo “Si me
matan, resucitaré en el pueblo salvadoreño”
Hernández reveló que
Mons. Romero nunca pronunció una de las frases más populares que le atribuyen.
Roberto Moroso de la
Roca, investigador italiano, realizó una detallada investigación sobre la vida
de Mons. Romero, que fue incluida dentro del proceso de beatificación. En ella,
explicó Hernández Aguilar, queda en evidencia “que la frase es apócrifa”.
“Moroso de la Roca hace
una investigación muy exhaustiva y descubre que un periodista guatemalteco
publica una entrevista que supuestamente se habría dado por teléfono entre él y
Mons. Romero, pero la publica justo días después de su asesinato. Mons. Romero
no podía ya defenderse contra eso”.
Moroso de la Roca
encontró además “que ese periodista tenía ya antecedentes de haber mentido en
otras entrevistas” e incluso años antes se atribuyó a sí mismo “una frase muy
parecida a la que años después atribuye a Mons. Romero”.
En contraste, “si uno
lee los apuntes espirituales de Mons. Romero, días, semanas antes de su
asesinato, uno no descubre ese mesianismo en Mons. Romero”.
“Mons. Romero sí tenía
miedo a morir, se daba cuenta de que su muerte iba a ser violenta además, y
tenía un miedo natural”, señaló Hernández Aguilar, subrayando que “es evidente
que no es capaz de decir unos días antes de su muerte una frase tan mesiánica”.
Para Hernández es “muy
factible que el Papa Francisco se identifique un poco” con Mons. Romero por las
tergiversaciones de la prensa sobre sus mensajes.
“Eso le pasaba todo el
tiempo a Mons. Romero, todo el tiempo. Por eso yo encuentro muy factible que el
Papa Francisco se identifique un poco, hasta por esas razones, con Mons.
Romero”.
Mons. Romero, reiteró,
“fue muy tergiversado. Él mismo además lo denunciaba, él decía ‘no tergiversen
mis palabras, por favor consignen las cosas que he dicho y cómo las he dicho’”.
La guerra civil en El
Salvador comenzó en 1980 y duró doce años, enfrentando a las agrupaciones de
izquierda conglomeradas en el Frente Farabundo Martí para la Liberación
Nacional (FMLN) y las Fuerzas Armadas de El Salvador, que respondía a un
gobierno de extrema derecha.
En este contexto de
enfrentamientos fue asesinado el entonces Arzobispo de San Salvador, Mons.
Óscar Arnulfo Romero, el 24 de marzo de 1980. A inicios de febrero de 2015, el
Papa Francisco reconoció que la muerte del Prelado salvadoreño fue por odio a
la fe y aprobó su beatificación.
“Creo que Mons. Romero
va a ayudar bastante a que en los próximos años no solamente vayamos
reconociendo quién fue en verdad y que nos vayamos también a ir identificando
con su mensaje. Vamos a comenzar a vernos entre nosotros de otra manera”,
agregó Hernández.
“Si eso además nos pone
a rezar y nos hace ver a la Iglesia de otra manera, y quienes manipulan a Mons.
Romero dejan de manipularlo dándose cuenta que destruyen su mensaje y se
convierten en asesinos de su mensaje, como otros lo fueron de su persona, eso
va a ayudar bastante a que el país se reconcilie finalmente”, indicó.
En horas de la noche de
este jueves, arribó al aeropuerto internacional monseñor Óscar Arnulfo Romero,
el cardenal Angelo Amato, Prefecto de la Congregación para las Causas de los
Santos de la Santa Sede y Gadálmez y fue recibido por el vicecanciller
salvadoreño Carlos Castaneda.
"El motivo de mi
presencia es el reconocimiento solemne por la ceremonia de beatificación de la
calidad heroica, de la fe profunda, de la esperanza viva de Monseñor Romero,
hijo y pastor de esta tierra, auténtico testigo del Evangelio", dijo el
cardenal Amato.
Amato -quien presidirá el acto de beatificación- recibió las
llaves de la ciudad de San Salvador y la Declaración de Huésped de Honor de
manos del alcalde Nayib Bukele.
Peregrinación previa a beatificación de Monseñor Romero
ANUNCIA BEATIFICACIÓN DE MONSEÑOR ROMERO
Con la imagen del obispo mártir, se oficializó la noticia en boca del enviado del Vaticano, Vincenzo Paglia, quien es el postulador de la causa de monseñor Oscar Arnulfo Romero, sobre su beatificación.
“Yo espero, yo llamo, yo busco, yo ruego, Tu Justicia”
PROGRAMA 2015:
- TRIDUO -
Del 21 al 23 de Mayo a las 07:00 pm.
- SOLEMNE BESA PIE -
Sábado 23 de Mayo, de 07:00 am. a 07:00 pm.
(A realizarse en su Capilla).
TODOS ESTAMOS CORDIALMENTE INVITADOS
- SOLEMNIDAD Y PROCESIÓN-
Domingo, 24 de Mayo a las 02:00 pm.
Recorrido Procesional:
(Se realizará tradicionalmente el 4to. Domingo de Mayo).
Sale de la Basílica del Santísimo Rosario, Jr. Conde de Superunda Cdra. 2, Jr. Cailloma Cdra. 2, Jr. Callao Cdras. 2 y1, Jr. Huallaga Cdra. 1, Jr. Carabaya Cdra. 2, Jr. Junín Cdra. 1, Jr. Conde de Superunda Cdras. 1 y 2, Ingresa a la Basílica del Santísimo Rosario del Convento de Santo Domingo de Lima (08:00 pm.)
La imagen del Señor de
la Justicia es venerada en una de las capillas de la Basílica del
Santísimo Rosario, conocida como la
Iglesia de Santo Domingo, donde miles de devotos y fieles lo visitan
diariamente, su imagen representa la defensa de la justicia en todas las
facetas de la vida, donde los limeños ponen sus esperanzas y aflicciones para
el consuelo divino. Para esta celebración llegan al país peruanos del
extranjero, asimismo jueces y abogados. También se registró varios milagros
realizados por su divina imagen, haciendo su presencia imponente ante los ojos
de los visitantes que piden por su ayuda.
Historia del Señor de
la Justicia
El 24 de mayo de 1940,
un terremoto asoló la Cuidad de Lima, entre los principales edificios
coloniales afectados se contó la Basílica del Rosario, templo de Santo Domingo,
recayendo el mayor daño en su esbelta torre que hubo de ser demolida en
parte. Pero algo llamó la atención y
admiración de la gente, causando esperanza en medio de la angustia y pánico: la
Hermosa imagen del Señor de la Justicia, que se veneraba en una de las
capillas, había permanecido intacta y sin sufrir ningún deterioro de ninguna
clase a pesar de tanta ruina. Podemos decir que allí se redescubrió su culto.
Se escuchó el mensaje del Señor, en medio del dolor, Dios es la esperanza.
Torre de la Basilica del Rosario 24 mayo 1940
En un breve tiempo su
devoción fue en incremento, acudían hasta su presencia las personas afligidas
por los problemas judiciales o por otras injusticias. Sin duda relacionada esta
devoción con la piadosa practica de recordar los Viernes de la Pasión de
Cristo. Se fue implantando la costumbre de celebrar ese día de Santa Misa en su
capilla. Efectivamente, al repararse la imponente y hermosa torre, también se
arreglaron las dos capillas; en la capilla menor se preparó un pequeño altar
para la imagen del Señor de la Justicia.
El año 1948, un grupo
de fieles mandaron confeccionar un hermoso sillón de madera tallada, que fue
usado por la sagrada imagen hasta 1958. Ese sillón de madera se conserva en el
convento de Santo Domingo de Lima; tiempo más adelante fue utilizado por el
fallecido Papa Juan Pablo II en la audiencia a los religiosos en su segunda
visita al Perú en 1988. El actual sillón de plata fue obsequio de sus devotos,
desde 1958 símbolo de agradecimiento a la imagen por su protección y favores
para sus fieles.
Como aquella capilla
menor ubicada bajo la torre de Santo Domingo, resultó completamente
insuficiente para el número de fieles que acudían a visitarlo frecuentemente,
principalmente los días viernes, en 1971 los Padres Dominicos acordaron
trasladar la imagen milagrosa a la capilla del frente (Capilla de Ntra. Sra. De
Rosario de San Martín) y es la ubicación en que se venera actualmente. Se
acondicionó el altar, se compraron nuevas bancas y hasta se adquirió un
armónium para solemnizar las ceremonias.
Con el correr de los
años la Misa en honor al Señor de la Justicia, celebrada todos los viernes del
año a las 9 a.m., ha llegado a convertirse en una práctica tradicional para los
numeroso devotos, a tal extremo llegó la difusión y fama de su culto que en
1984 se determinó celebrar dicha misa en el Altar Mayor de la Basílica del
Rosario. Para ello un grupo de devotos mando a elaborar una réplica en un
cuadro con marco de madera plateada que cada semana se lleva procesionalmente
junto al altar mayor. Esta celebración Eucarística es muy concurrida.
La fiesta principal de
nuestro Señor de la Justicia se celebra el último domingo de mayo, acude mucha
gente que aclama al Señor y proclama sus favores. Al término de la Misa solemne
concelebrada por la Orden de Predicadores, se realiza la salida procesional del
Señor de la Justicia por la calles de nuestra ciudad, acompañado por gran
cantidad de fieles, hoy posee unas hermosas andas talladas en madera y que con
el paso de los años, espera convertirse en un digno trono de plata para esta
imagen tan querida por el pueblo católico de Lima. A esta fiesta preside un
solemne triduo, igualmente concurrido por los fieles.
Poco a poco se fueron
agrupando y organizando los devotos de esta advocación. Durante varios años se
fueron conociendo en el trabajo y la promoción del culto, así como en labor
social para el pueblo; es así como surgió la Comunidad del Señor de la Justicia
en 1988, que el Convento de Santo Domingo de Lima ha aceptado dentro de sus
instituciones piadosas. Su finalidad principal es la atención y difusión del
culto a su imagen titular, cuidar la Santa Imagen y socorrer a las personas con
justicia y amor.
La Arquidiócesis de
Lima ha querido restaurar las piadosas costumbres de antaño, que expresan la
profunda vivencia pascual de los fieles. Una de ellas son las solemnes
procesiones con los principales pasos o momentos de la Pasión del Señor durante
la Semana Santa. Dentro de esta perspectiva se ha indicado que el martes Santo
se realice la salida procesional del Señor de la Justicia desde la Basílica del
Rosario realizando estación en nuestra Catedral Primada. El mensaje y la gran
devoción que ha suscitado entre los limeños, muy bien justifican este público
homenaje que la Iglesia de Lima rinde a Cristo en esta advocación propiamente
limeña.
Vestimenta para el segundo día del Triduo - Mayo 2015